El viaje a León que salvó del deshaucio a una joven familia vasca

Patricia contaba que el mismo lunes ya llamó el joven, «muy nervioso», cuando supo que ya había tocado el boleto con catorce apuestas. «Cuando se enteró del pleno al quince volvió a llamar, que vaya alegría pero, sobre todo, que cuándo podría cobrar el premio, que le urgía y me explicó la situación». Se trata de una familia con dos hijos que estaba a punto de perder su vivienda. «Vamos a hacer todo lo posible para que esta familia pueda cobrar la cantidad del premio, que no se esperaban tanto dinero, para que puedan hacer frente a la deuda y puedan seguir con su vida», explicaba la lotera. De hecho, el boleto fue ayer depositado en la entidad bancaria y se va a realizar un trato de favor al joven por esta causa.

El joven -quien prefirió no facilitar su identidad- realizó la semana pasada un viaje a León para visitar a un familiar. En el viaje, hizo un alto en el camino, en Mieres, y entró al centro comercial. «Vino a comprar lotería y, como suelo hacer con los clientes, le ofrecí una de las participaciones de nuestra peña; él no quería, que no entendía nada de fútbol... Pero al final lo convencí y se llevó el boleto».

Patricia explicaba que hay abonados fijos a la peña pero hay otro tipo de clientes que compran el boleto. «Al final, me dijo que le daba buen pálpito, porque se trataba de un boleto con muchas apuestas múltiples, que había más posibilidades de llevarse un pellizco». Y así fue.

El encargado de rellenar el boleto es Miguel, el padre de Patricia. «Ya ha acertado en varias ocasiones; siempre se encarga él de esto». Por eso, el agraciado de Cantabria quiso lanzar un mensaje de agradecimiento a Miguel; «dale las gracias a tu padre por este regalo».

Patricia estaba contenta el martes por repartir el premio, pero ayer estaba encantada de haber podido ayudar a una familia «que se encontraba realmente en apuros».