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Una tormenta de verano trae la oscuridad a León y obliga a refugiarse a viandantes
Una repentina granizada, acompañada de aparato eléctrico, sorprende a los leoneses a la hora de la comida
Tras un anticipo a mediodía, el pronóstico se cumplió y el cielo se rompió a la hora en la que muchos leoneses se dirigían a sus hogares a comer.
Aemet había establecido el aviso amarillo por tormentas, con especial afectación a las 15:00 horas. Fue una hora antes, sobre las 14:00, cuando poco a poco las nubes se cernieron sobre la capital.
La claridad desapareció y se hizo prácticamente de noche con unas nubes que anunciaban y advertían de lo que estaba a punto de ocurrir. Sin embargo, a muchos les pilló en punto de no retorno.
Una breve, pero intensa, granizada fue el preludio de la tormenta que empezó a descargar durante varios minutos.
Los negocios hosteleros tuvieron que recoger a prisas sus mesas, sillas y sombrillas; mientras que los peatones se refugiaban como podían en tejadillos.
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Los más valientes siguieron adelante y se aferraron al paraguas, ante el intenso viento que soplaba en ese momento, para avanzar hacia su destino.
El granizo dejó paso a la lluvia, que acompañaba al numeroso aparato eléctrico que descargó sobre la ciudad con varios rayos y truenos.
El anticipo del verano, con temperaturas impropias del mes de mayo, daba un alivio con un ambiente más fresco y húmedo. Pero solo será cuestión de unas horas, ya que el fin de semana se plantea con temperaturas que seguirán por encima de los 30 grados para dar la bienvenida al mes de junio.
