
Diez reconoce que la situación de los colegios es «insostenible» pero carga tintas contra la Junta
El alcalde pide a los padres «mentalizarse» de que la culpa por el déficit de mantenimiento es de la administración autonómica al ser necesaria una reposición de materiales
El alcalde de León ha tratado de salir del paso de la gran protesta protagonizada este viernes en el CEIP Quevedo en la que se le culpó directamente del déficit de mantenimiento que arrastra el centro.
José Antonio Diez reconocía que hay colegios con más de 60 años «que llevan muchísimo tiempo sin inversión» y calificaba de «insostenible» la situación ante la falta de inversión que les ha llevado a un «deterioro alarmante».
Sin embargo, el regidor recordaba que la vida útil de cualquier edificio es limitada y cargaba tintas contra la Junta de Castilla y León al recordar que el problema de los colegios «no es una cuestión de mantenimiento, sino de reposición» y ahí la competencia es autonómica.
Sí reconocía la urgencia del Ayuntamiento de León para acometer mejoras en la cubierta del pabellón del colegio, de titularidad municipal, y que aseguró se acometería cuando las condiciones climatológicas lo permitieran. Pero insistía en que «el grueso» de los problemas, como la instalación, la falta de calefacción, la carpintería, los aseos o la retirada de uralita era responsabilidad de la Junta. «Mientras las Ampas no se mentalicen de esto y sigan yendo a la administración más fácil, no lo vamos a resolver. Me ofrezco a ir donde haga falta, especialmente a la Junta, para exigir estas inversiones», finalizó en su explicación.
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