La plaza del Grano de 1989
La reforma realizada en esta zona de la ciudad supuso el levantamiento de todo su empedrado | La actuación ahora planteada supone recuperar, con el mismo sistema constructivo, las zonas dañadas
J.C.
Miércoles, 15 de febrero 2017, 17:21
El empedrado de la Plaza del Grano no es del siglo XVI, como de forma reiterada se ha esgrimido por parte de quienes se oponen a la actuación en esta zona de la ciudad. Lo recuerdan los hermanos Seoane, Pelayo y José Andrés, que realizaron junto con un nutrido grupo de obreros la última reforma en la zona.
José Andrés recuerda que fue en 1989 cuando se levantó por completo el empedrado de la plaza siguiendo un sistema constructivo que empleaba barro y cal, además de la colocación 'piedra a piedra' manteniendo los 'pasillos' interiores y las pendientes para el paso del agua, además de las ondulaciones en casa uno de esos pasillos.
Zonas dañadas
Ahora, la remodelación de las zonas dañadas, propone la misma actuación que entonces, sin emplear hormigón en ningún caso, rechazando así otro de los argumentos de los colectivos sociales.
La obra de 1989 fue realizada «sobre la solana original» que se encuentra «más abajo» y de la que se han localizado restos en las diferentes catas acometidas en la antesala de la obra.
Las imágenes de aquella época dejan ver cómo se situaron las piedras y cómo se realizó una obra que en la actualidad pretende recuperar todo el esplendor de la plaza.
La historia
La Plaza del Grano recibe su nombre por ser la zona en la que se comerciaba como mercado con grano y cereales, principalmente, aunque como en otros muchos mercados, también había artesanos, curtidores, y comerciantes de carnes y pescados.
Además ha sido lugar oficial donde se pregonaban las ordenanzas, e incluso como plaza de toros. La fuente del centro de la plaza, inaugurada en 1769, representa la confluencia de los ríos Bernesga y Torío.