Choque de trenes por el ascenso

Llega un fin de semana que puede dejar prácticamente decantado todo o, en caso contrario, hacer volar la parte alta de la Primera Federación por los aires. La Deportiva recibe este sábado (16:00 horas) al Bilbao Athletic en lo que será un duelo directo por el ascenso. Porque sí, la Deportiva sigue intentando agotar sus balas en la pugna por el primer puesto, pero la otra realidad es que, en caso de perder, podría llegar a quedarse con solo dos puntos de colchón sobre el playoff.

Doble importancia la que tiene el encuentro para una Deportiva algo mermada en cuanto a la ausencia de nombres importantes. El Toralín, obligado a vestir sus mejores galas para llevar en volandas a su equipo ante un filial vasco acostumbrado a triunfar a domicilio.

Llegan los de Javi Rey tocados anímicamente, después de que la pasada jornada tuvieran la oportunidad de ponerse a dos puntos de la Cultural y la desperdiciaran con una dolorosa derrota en Tarazona (1-0). Completamente adversa es la dinámica del Bilbao Athletic, que aterrizará en El Toralín tras vencer al líder (2-0) y conseguir así mantener una racha de siete jornadas sin conocer la derrota.

La buena racha del conjunto bilbaíno no será lo único a lo que deberá hacer frente el equipo berciano, pues el técnico tendrá que lidiar con dos ausencias importantes por sanción. Los dos laterales, Carrique y Álvaro Ramón, vieron en Tarazona la quinta amarilla y deberán quedarse fuera de la convocatoria el próximo sábado. A priori, no es tan importante la baja de Álvaro Ramón como la del lateral diestro francés, que ha jugado absolutamente todo en liga a expensas de los minutos finales en el duelo ya decantado ante la Gimnástica Segoviana.

El lado más positivo de la semana lo aportan Andrés Prieto y Borja Valle. El guardameta, que se dislocó un dedo en el último partido, está recuperado y listo para seguir siendo el guardián blanquiazul. De la misma forma, el capitán, que tuvo que retirarse del campo por un duro golpe en la cabeza, también llega en condiciones a un duelo que requiere lo mejor de ambos equipos.

El Bilbao Athletic, tras un inicio de temporada plagado de dudas y varios meses en la zona baja de la categoría, ha conseguido el rodaje suficiente para demostrar que es un serio candidato a luchar por el ascenso a Segunda División. Bien es sabido por todo que los filiales siempre son equipos diferentes, con desparpajo, sin presión y plagados de calidad en futbolistas, en muchos casos, listos para dar el salto a la élite. Y más aún en el caso de los rojiblancos por su política de fichajes.

El cuadro de Jokin Aranbarri se ha convertido con el paso de las jornadas en un equipo correoso, sobre todo a domicilio, donde son el mejor equipo de la categoría, un punto por encima de la Cultural (2º) y cuatro por encima de la Deportiva (3º).

La dificultad del desafío deja claro que es una auténtica final para la Deportiva, como así lo confirmó el propio Yeray Cabanzón en sala de prensa durante la semana: «Tenemos cuatro finales, empezando por la del sábado. No podemos pensar en otros partidos», reconoció.

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