Fasgar, un mes «con el fuego encima de nosotros»: «Es inentendible»
El incendio originado el 8 de agosto sigue activo y está siendo vigilado para evitar reactivaciones en una comarca que espera a ser extinguido definitivamente para evaluar daños y «mirar al futuro»
Era pleno verano, con algunos de los vecinos naturales de la Omaña que viven fuera más de vida a estos pueblos. Pero un incendio - ocasionado por un rayo - rompió esa tranquilidad para iniciar un periodo de pesadilla que dura ya un mes.
El incendio de Fasgar se declaró en la tarde del 8 de agosto y un mes después sigue estando activo, aunque con un nivel de actividad bajo. «Vemos algún punto caliente en la zona de Tremor, Villapujín o La Guariza y sigue oliendo bastante a humo», explica a leonoticias Rosi Fernández, vecina de Fasgar.
La localidad estuvo durante varios días evacuada por la peligrosidad de las llamas, que se acercaron mucho al pueblo y, de hecho, la panorámica desde el casco urbano de Fasgar es «doloroso»: «Está todo arrasado. Lo lógico es que se declare zona catastrófica».
Es una opinión que comparte María del Carmen Mallo, alcaldesa de Murias de Paredes, municipio al que pertenece esta localidad, que pide «sosiego y coordinación» para la llegada y reparto de esas ayudas una vez se extinga por completo el fuego: «Todavía está la tierra muy caliente y está siendo vigilado. Están siendo incendios atípicos».
Aún hay medios en la zona
Con algunos medios todavía desplegados en la comarca, los vecinos consideran «inentendible» que acumulen un mes «con el fuego encima de nosotros». «Se ha cometido un error tras otro. No hay tanto combustible en los montes», lamenta Rosi Fernández.
El daño es importante para esta comarca que vive de la naturaleza, tanto a través de la ganadería como del turismo rural: «Los perjuicios son grandes», expone Mallo, que insiste en que hasta que el fuego no se dé por extinguido, no se podrá «evaluar» con exactitud el alcance de estas consecuncias.
«Debemos de caminar con cordura y solidaridad, teniendo esperanza y mirar al futuro con ánimo. No es tiempo de desfallecer, sino de resistir», sostiene la alcaldesa, que recalca que «no se ha hecho la prevención adecuada».
De esta manera, Fasgar mira aún con preocupación al monte, a un entorno negro por completo, calcinado por uno de los incendios más devastadores que se han dado en la provincia de León y que más de 30 días después sigue activo.