Castilla y León mantiene su negativa a implantar el bautizado por Vox como 'pin parental'
El gobierno autonómico descarta esta opción con su socio Ciudadanos, que sí la apoya en Murcia
La Junta de Castilla y León, gobernada en coalición por el PP y Cs, no implantará el bautizado por Vox como «pin parental» para permitir a los padres de los alumnos controlar si acuden o no a determinadas actividades programadas dentro del currículum, al considerar que no existe adoctrinamiento alguno en las aulas de esta comunidad.
Pese a la polémica suscitada en los últimos días a raíz del acuerdo presupuestario alcanzado en Murcia entre el PP, Cs y Vox para que este veto se utilice en esa región, fuentes de la Consejería de Educación han explicado a Efe que este departamento mantiene su postura ante esa demanda.
Han recordado que fue en octubre pasado cuando la consejería que dirige Rocío Lucas (PP) recibió a representantes de la asociación Hazte Oír y les trasladó que no tenía intención de aplicar en Castilla y León este sistema de control de los contenidos escolares en materias como la sexualidad, la igualdad de derechos del colectivo LGTB o la existencia de distintos modelos familiares, entre otras.
A la salida de la reunión, los responsables de la asociación lamentaron la negativa de la Consejería de Castilla y León a aplicar esta medida: «Se ha mostrado contundentemente en contra del pin parental», resumieron.
En el caso de Castilla y León, el PP y Cs no necesitan a Vox para sacar adelante los presupuestos autonómicos, por lo que si los integrantes del gobierno de coalición mantienen sus posicionamientos en esta Comunidad no prosperará la demanda de Vox