El Gordo es para el 72897

A las 12:02 horas salió el Gordo. El número 72897 fue cantado en la sexta tabla por los niños Unai Barón Maldonado y Alexander René Herrera. Se ha vendido en once comunidades, aunque son tres los epicentros de la felicidad. Dos administraciones de Punta Umbría (Huelva) y Reus (Tarragona) repartieron 60 series cada una. Si han vendido todos los décimos, han despachado 480 millones de euros; 480 millones de felicidad. «Se ha quedado en el pueblo», afirma convencida Cristina Ferrara, una de las responsables de esta administración situada en la avenida Andalucía de la localidad onubense. Cree que la venta a turistas, lógica en un lugar de veraneo tan conocido, es mínima y que se ha repartido entre los vecinos. «Son muchos millones y estamos muy contentos: hacía mucha falta», recalca la lotera que no sabía que lo había vendido hasta que el teléfono comenzó a sonar de forma frenética.

Es la primera vez que el Gordo cae en Punta Umbría y la cuarta en Huelva, aunque siempre antes habían sido décimos sueltos. La suerte de 72897, el quinto más alto de la historia y la vigésimo segunda vez que termina en este número, también sonrió a Reus. La localidad tarraconense tiene, por segundo año consecutivo, hilo directo con la diosa Fortuna. El año pasado, el Centro Aragonés El Cachirulo vendió unas 3.200 participaciones (320 millones) adquiridos en Salou. Este martes, fue una administración de Reus, La Pastoreta, la que repartió 60 series del primer premio. El lotero Òscar Bausá afirmó que «el 90%» de las ventas habían sido en la fábrica Teixidó de Ruidecols. A los trabajadores de esta empresa especializada en piezas mecanizadas de alta precisión, también les tocó un buen pellizco del 26590 del año pasado. «Como lotero, me considero un vendedor de ilusión. Hoy la ilusión ha entrado en nuestra casa», afirmó un feliz Bausá.

La tercera gran parada fue Granada, en la calle del Príncipe. Allí estaban asignados 45 series del 72897, un número que pasará a la historia. Como el 43728, que en 1997 provocó el éxtasis en la capital nazarí. Entonces, la administración repartió 38.000 millones de pesetas, unos 228 millones de euros. Ha podido repartir otros 180 millones de euros.

El viaje de la felicidad paró por Madrid (Doña Manolita, cómo no) y por Boñar. En esta localidad de la montaña oriental leonesa, se vendieron en ventanilla 14 décimos. «Son 5,6 millones», apunta al detalle Cristina Manso, responsable de la única administración de este municipio de menos de 2.000 habitantes. También es repetidora con el Gordo. En 2014, vendió una serie del 13437.

Los vecinos, con algún agraciado escondido entre ellos, se iban acercando a la administración de Cristina poco a poco y enmascarados. Misma estampa se vivía en el kiosco de Martín González, situado en la calle Víctor Gallego, «enfrente de los multicines» de Zamora. «Gracias, María», dice a una clienta habitual cuando la enhorabuena por haber dado «un pellizco» del primer premio. Confiesa, en un principio, que no tenía ni idea de cuánto ha podido repartir entre los ciudadanos de la ciudad castellana del 72897. La Selae aclaró que solo había vendido un décimo en la máquina automática.

También se ha vendido en Valencia (Alfara del Patriarca y Oliva), Tarragona (Bonavista, además de Reus), Bilbao, Pontevedra (O Grove, Vigo y O Porriño), Tenerife (Granadilla de Abona), Alicante (Javea), Cáceres, Cádiz (El Puerto de Santa María), Córdoba, Las Palmas (Haría), Madrid (en un centro comercial de Moratalaz), Murcia (San Pedro del Pinatar) y Salamanca.