Un varón acusado de estafar a un matrimonio más de 62.000 euros se enfrenta a dos años de cárcel
El acusado les engañó para pedir dos préstamos para comprar dos vehículos y luego repartir los beneficios de la venta mientras el pagaba las cuotas de los créditos, algo que nunca hizo | El juicio se celebra este 9 de mayo en la Audiencia Provincial de León
Un varón acusado de estafa continuada a un matrimonio se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial de León este lunes 9 de mayo a partir de las 10:00 horas.
Los hechos se remontan al año 2011, cuando el varón -con antecedentes penales por conducir sin carné- conoció al matrimonio y les prestó una cantidad de dinero indeterminada. Cuando el varón le pidió que devolviesen el préstamo la pareja alegó no poder hacerlo. Por ello, llegaron a un acuerdo para 'saldar' esa deuda y obtener un beneficio por las dos partes.
El acusado, con la intención de obtener un inmediato e ilícito beneficio patrimonial, les propuso que solicitaran préstamos bancarios para la adquisición de vehículos. El varón asumiría el pago de las cuotas del préstamo y también se encargaría de vender los coches a un tercero y las ganancias resultantes serían divididas entre ambas partes.
Intención ilícita
Tras el acuerdo, el matrimonio pidió dos préstamos con dos entidades bancarias, uno en octubre de 2011 y otro en noviembre de 2012, por 31.605 euros y 30.483 euros, respectivamente. El acusado sin embargo, no abonó las cuotas de los préstamos pedidos, «lo cual era su intención desde el principio», según remarca el fiscal en el escrito de acusación. Además también se quedó con los dos vehículos adquiridos de la marca Mercedes.
El fiscal asegura que existe un tercer contrato con otra entidad bancaria, pero que una de las partes del matrimonio se negó y el acusado tampoco llegó a suscribirlo.
Al no hacer los pagos de las cuotas de los créditos, las entidades bancarias comenzaron a reclamar el pago delas cuotas al matrimonio que fueron quienes contrataron los préstamos.
El fiscal considera que existe un delito continuado de estafa y pide una pena de dos años de prisión para el acusado, así como una indemnización de 62.088 euros por la cantidad defraudada al matrimonio.
