El fiscal pide diez años de cárcel para los dos atracadores de la sucursal del Santander en Quevedo
Llegados de Asturias en la mañana del 30 de junio de 2020 uno de ellos entra en la oficina y se hace con un botín de 3.000 euros, mientras el otro espera en las inmediaciones con el vehículo en marcha para emprender la huída
i.s.
León
Domingo, 23 de mayo 2021, 11:04
El plan parecía perfecto, pero no contaron con el trabajo y las investigaciones de la Policía Nacional de la capital leonesa. Dos hombres, residentes en Grado (Asturias), utilizaron el vehículo de la hija de uno de ellos para perpetrar un robo en la capital leonesa.
Llegados a León realizaron tareas de vigilancia desde el vehículo a la oficina bancaria del Santander situada en la avenida Quevedo número 6. Unas labores que apenas duraron 20 minutos según relata el fiscal en el escrito de acusación.
A las 14:10 horas del 30 de junio de 2020 uno de los acusados, con antecedentes penales, procedió a entrar en la oficina con un sobre con un billete en la mano y la otra guardada en la chaqueta sin levantar sospechas. El otro hombre, sin antecedentes, esperaba en la calle Pérez Galdós con el coche preparado para realizar una rápida huída.
Tal y como publicó leonoticias en ese momento, sólo un atracador entró en la sucursal armado con una pistola, cubierto con una mascarilla y portando la camiseta del FC Barcelona. Unos datos que ayudaron a la investigación.
El fiscal completa esta información asegurando que el varón acusado amenazó al empleado de la caja con un arma por encima del mostrador de protección y le obligó a darle todo el dinero. En ese momento sólo se pudo acceder a 3.000 euros que había en la caja, siendo suficiente este botín para el acusado.
Prisión provisional
Tras las pertinentes investigaciones se localizó a los dos atracadores. Uno de ellos, el varón que entró en la sucursal, ingresó en prisión provisional por esta causa el pasado 23 de julio de 2020, según ordenó el Juzgado de Instrucción número 2 de Grado.
El juicio se celebrará en León el próximo 27 de mayo, en el Juzgado de Penal 1 de León y ambos serán acusados de un delito de robo con violencia e intimidación en un local abierto con uso de arma.
El fiscal pide para cada uno de los acusados la pena de cinco años de prisión, así como la indemnización conjunta de los 3.000 euros sustraídos al banco Santander.