Cruz Roja celebra el 20 de junio el Día Mundial de las Personas Refugiadas
Desde el programa de acogida e integración de personas refugiadas y solicitantes de protección internacional se han atendido 113 personas en León durante el último año
Cruz Roja celebra el próximo 20 de junio el Día Mundial de las Personas Refugiadas bajo el lema de #SomosRefugio. Desde el programa de acogida e integración de personas refugiadas y solicitantes de protección internacional gestionado por Cruz Roja Española se han atendido un total de 37.425 personas en 2019.
Desde la Oficina Provincial de Cruz Roja Española León los datos se corresponden con cifras mucho más modestas, «pero no por ello han dejado de sumar al compromiso de la organización en sus diversas líneas de trabajo en materia de migraciones que abarcan la respuesta humanitaria, la proteccion, el apoyo y la integración y la defensa de las personas migrantes y desplazadas».
Durante el 2019 en León se han atendido a un total de 113 personas de hasta 15 nacionalidades distintas, destacando la presencia de Venezuela (45%), Honduras (8%), Colombia y Nicaragua (7%) por ser las más numerosas.
En este primer semestre del 2020 se han atendido a 46 personas, apreciándose un notorio cambio en el perfil de las demandas siendo ahora Colombia (28%), Venezuela (24%), Honduras (13%) y Nicaragua (9%) las más presentes.
Con todos ellos «nuestro objetivo es garantizar su proteccion e integracion social en España». Para ello «trabajamos desde el programa de acogida e integración de personas refugiadas y solicitantes de protección internacional financiado a través de diferentes convenios suscritos con la Secretaría de Estado de Migraciones, dependiente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Gobierno de España y en colaboración con las administraciones públicas de ámbito estatal, regional y local».
Dentro del día a día en el programa la participación del personal voluntario resulta clave para la prestación de algunos servicios como el de aprendizaje del castellano, o para la realización de otras acciones de acompañamiento impulsadas de forma transversal en las distintas fases y actuaciones del programa (acogida temporal, intervención social, asistencia legal y psicológica, etc.).
De igual manera el voluntariado ha tenido un espacio clave dentro de la adaptación a la atención de las personas refugiadas durante la pandemia por COVID-19. Y es que ha sido necesario adaptar ls actividad en este contexto ya que las personas refugiadas también se han visto afectadas por la pandemia por Covid-19 y han tenido que ajustar a una situación sobrevenida que ha limitado sus procesos de integración y autonomía, a menudo sin redes familiares ni otros apoyos cercanos con los que contar fuera de nuestra entidad.
Cruz Roja ha garantizado la atención en todo momento, adecuando las actividades esenciales previstas para cumplir con las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias. Además, se ha podido traducir y facilitar información a las familias y participantes sobre las medidas decretadas por las autoridades sanitarias, los mensajes y recomendaciones transmitidas desde la OMS y otras instituciones oficiales del sector de la salud, en diferentes idiomas.
Se han dispuesto planes de contingencia en todos los recursos residenciales gestionados por Cruz Roja y se han reforzado las actividades de apoyo psicológico. Desde el servicio de aprendizaje del idioma y formación se está haciendo un esfuerzo para adaptar los contenidos didácticos al uso del móvil y preparando la versión online de los mismos. Al igual que con los programas de empleo, que están rediseñando sus intervenciones para el acceso a formaciones de manera telemática, quedando de manifiesto la importancia de poseer competencias digitales.