Más de 40 años de cárcel para dos curas por abusar de menores en Argentina

Tres años después de las denuncias que conmovieron al mundo, dos curas y un civil fueron condenados este lunes a prisión por 25 casos de abuso sexual de menores hipoacúsicos internados en el instituto Antonio Próvolo de la provincia argentina de Mendoza. El sacerdote argentino Horacio Corbacho, de 59 años, fue sentenciado a 45 años de prisión. Su colega Nicola Corradi, italiano, de 83 años, condenado a 42 años y el jardinero Armando Gómez, de 49 años, a 18.

El tribunal los halló culpables de abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores, delitos agravados por tratarse de los responsables de su cuidado y por ser ministros de culto. Los jueces consideraron probada su responsabilidad en delitos aberrantes contra niños y niñas sordomudos tales como insinuaciones, obligación de ver material pornográfico, tocamientos, violaciones en manada y malos tratos. Una de las víctimas aseguró que había sido violada a los cinco años. Otra niña relató con lenguaje de señas que debía usar pañal por el sangrado que le producían las vejaciones.

Corradi ya había sido acusado de abusos sexuales en 1969 en el instituto Próvolo de Verona, en Italia. Según un testigo, pudo elegir entre la cárcel o huir a América. Desde entonces estuvo en los institutos Próvolo de La Plata y Mendoza.

Las familias de las víctimas, hoy casi todas ya mayores de edad, celebraron las penas, muy cercanas a las que reclamaba la Fiscalía. Los acusados ya estaban en prisión preventiva desde hacía tres años.