El Patatas Hijolusa continúa su buena racha
El equipo leonés consiguió su sexta victoria en siete partidos en un duro encuentro contra Universidad de Burgos Babieca.
Otra victoria para el Patatas Hijolusa, que comenzó su doble compromiso (vuelve a jugar mañana, martes, en Palencia) con buen pie, derrotando al Universidad de Burgos Babieca en casa. El conjunto burgalés, duro y grande, se lo puso difícil a las de Bea Pacheco, que solo consiguieron asegurar el partido en el último cuarto.
Patatas Hijolusa
Clara Fidalgo (4), Silvia Fernández (7), Iria González (-), Claudia Orbea (12), Débora González (13) —quinteto inicial—, Irene Martínez (10), Lucía Castro (-), Raquel García (-), Marta González (12), Ángela García (3), Celia Gómez (3), Julia Rodríguez (5).
69
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50
U. Burgos
María Jimeno (13), Gadea Hidalgo (5), Marta Rodríguez (3), Morgane Savoye (8), Marta Ballester (4) —quinteto inicial—, Alicia Elvira (-), Sandra Merino (8), Elvira Turrientes (-), Beatriz Martínez (5), Rebeca Llorente (4).
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Parciales: 14-15, 17-15, 14-9, 24-11.
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Árbitros: Martínez, D.; Andrea, M.
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Incidencias: Encuentro de la séptima jornada de la primera división nacional femenina, disputado en el Pabellón San Esteban (León) el 29 de octubre de 2022 a las 17:30.
El planteamiento del partido por parte del Patatas Hijolusa pasaba por intentar responder a los centímetros del Universidad de Burgos Babieca con las mismas armas: un quinteto titular tradicional, con juego interior que pudiera defender y responder a los ataques de las burgalesas. Esto se tradujo en un toma y daca continuo entre ambos equipos, con pocos triples y múltiples viajes a la línea de tiros libres, algo que ninguno de los conjuntos supo aprovechar (ambos tuvieron un porcentaje por debajo del 50 % en este primer cuarto) para conseguir construir una ventaja significativa (14-15).
Durante el segundo cuarto, el Patatas Hijolusa puso un poco más de énfasis en el juego exterior, consiguiendo anotar varios triples que les sirvieron para irse cinco puntos arriba hacia mediados del periodo. No obstante, el equipo burgalés fue capaz de evitar la escapada, principalmente a través de su juego interior y con la ayuda de algún triple esporádico, lo que dejaría el marcador en un 31-30 al descanso.
Tras el paso por vestuarios, el partido siguió la misma tónica: un intercambio de golpes que hacía que el marcador avanzase de manera paralela. Esta vez, no obstante, era el Universidad de Burgos Babieca el que anotaba de tres, mientras que las leonesas buscaban el aro más de cerca, aprovechando la menor movilidad de un equipo burgalés de mayor talla. Esta situación dio sus frutos, aunque pequeños durante este tercer cuarto: el Patatas Hijolusa consiguió irse al último periodo con una ligera ventaja que podría ser importante si se manejaba bien (45-39).
Quinteto pequeño
Probablemente influida por los buenos resultados que habían tenido las jugadoras exteriores atacando el aro burgalés, Bea Pacheco decidió explotar las debilidades del oponente y sacó a la pista un quinteto pequeño, sin jugadoras interiores, con la intención de correr e imponer su mayor rapidez. El plan funcionó: las jugadoras leonesas conseguían tiros exteriores liberados causados por la necesidad de dar ayudas excesivas del equipo rival y, cuando estas ayudas no llegaban, finalizaban bajo el aro con relativa facilidad. Mientras tanto, el Universidad de Burgos Babieca no fue capaz de sacar ventaja de su mayor tamaño, y vio cómo el partido se le iba, poco a poco, hasta estar fuera de su alcance (69-50)
Las chicas del Patatas Hijolusa viajarán mañana a Palencia para enfrentarse a Villamuriel, otro de los equipos que, a priori, ocuparán los puestos de playoffs cuando termine la temporada regular. Será una oportunidad más para mostrar el buen momento de forma del conjunto leonés, que se perfila cada vez más como un verdadero equipo en el que las 12 jugadoras son importantes y están preparadas para responder cuando su entrenadora las necesita.
