El Diálogo Social inicia los trabajos para el nuevo Plan General de FP, que se centrará en la «equidad, calidad de los servicios y empleabilidad»

La Junta de Castilla y León y los agentes económicos y sociales constituyeron este lunes la Mesa del Plan General de Formación Profesional 2021-2025. El Diálogo Social da inicio así a los trabajos para trazar la nueva hoja de ruta de la FP de la Comunidad, una labor que desarrollarán de forma conjunta la Consejería de Educación, los sindicatos CCOO y UGT y la patronal CECALE.

El futuro plan se enmarca en la III Estrategia Integrada de Empleo, Formación Profesional, Prevención de Riesgos Laborales e Igualdad y Conciliación en el Empleo. La «equidad, la calidad de los servicios y la empleabilidad» para jóvenes y adultos serán los principios que marquen el futuro de la Formación Profesional.

Para elaborar el plan será necesario, aseveró la Junta, analizar previamente la situación actual, las recomendaciones europeas y los planes en vigor a nivel nacional y regional. Así, las políticas estarán alineadas con el resto de ámbitos territoriales y «podrán servir para cumplir los objetivos marcados» por el Gobierno autonómico, «tanto en formación y empleo, como en políticas de cohesión y de crecimiento».

El nuevo Plan de FP «deberá orientar» las enseñanzas al cumplimiento de objetivos en varias direcciones: el desarrollo personal del alumno, el ejercicio del derecho al trabajo, el acceso en igualdad a las diferentes modalidades de la formación profesional o la satisfacción de las necesidades del sistema productivo.

Asimismo, el documento tendrá que afrontar los principales retos con los que se encuentra el sistema de Formación Profesional a nivel autonómico: el reto demográfico, las tendencias del sistema productivo, el impacto de la tecnología 4.0, las necesidades de nuevos perfiles profesionales y la recuperación de la actividad y el crecimiento económico tras la crisis de la COVID-19.

Para diseñar el nuevo Plan, continúo la Administración, será «muy útil» analizar lo conseguido con el anterior, que tuvo como horizonte 2016-2020. En este sentido, el programa que ahora concluye «ha permitido impulsar la FP en Castilla y León de una forma importante», ya que en este tiempo los estudios «han ganado prestigio y alumnos». En este curso, los matriculados superan los 42.000.

La inserción laboral supera el 83 por ciento de media y se han creado más de mil puestos de aprendizaje dual con empresas de todos los sectores productivos. También se ha puesto en marcha un sistema de movilidades Erasmus para que el alumnado de FP pueda formarse en empresas de otros países europeos, siendo una de las comunidades que más movilidades gestiona.

La Junta subrayó que en estos años «se ha potenciado y aumentado» casi un 40 por ciento el número de centros integrados de Formación Profesional, hasta llegar a los 32 actuales. Igualmente, se ha incrementado significativamente el catálogo de titulaciones ofertadas, con 123 títulos diferentes en régimen presencial y 20 en educación a distancia.

La formación en centros de trabajo se ha desarrollado «de forma satisfactoria», con más de 50.000 alumnos que han realizado prácticas en empresas durante el desarrollo del Plan -alrededor de 11.000 cada año-, periodo en el que han realizado más de 20 millones de horas de formación -una media de 4.125.000 horas al año-.

Por último, la Formación Profesional Dual «ha despegado» en Castilla y León gracias al trabajo de los últimos años, pasando de 167 a 460 empresas colaboradoras con proyectos autorizados. En estos momentos se ofertan más de mil puestos de aprendiz para un total de 20 familias profesionales, lo que supone un incremento del 253 por ciento.

Cabe resaltar que, en cuanto al porcentaje de matrícula en estudios de FP sobre el total de estudiantes de entre 16 y 34 años, Castilla y León se situó en 2019 a la cabeza de las comunidades autónomas, alcanzando el 40 por ciento, seguida de Galicia (34 por ciento), País Vasco (32), Andalucía (26 por ciento) y Madrid (19 por ciento).