El pueblo de León que reabre su bar tras ofrecerlo gratis para «devolver la vida al pueblo»
Benamariel recupera su bar vecinal gracias a una nueva gestora que asumirá el local sin pagar alquiler ni suministros
La pequeña localidad leonesa de Benamariel, en el municipio de Villamañán, está a punto de recuperar un espacio esencial para su día a día: su bar vecinal. Tras ofrecer el local completamente reformado de forma gratuita, la Junta Vecinal ha encontrado a una persona para hacerse cargo de la gestión del establecimiento, que podría reabrir sus puertas en los próximos días.
Publicidad
El alcalde pedáneo, Jorge Barrientos, explica que no ha sido un proceso sencillo. «Al principio apenas recibimos dos solicitudes en una semana, pero finalmente encontramos a una persona con buenas referencias y experiencia en cocina. Para nosotros eso era fundamental, porque acabábamos de invertir en una cocina nueva y queríamos que se aprovechara», señala.
El bar, ubicado junto a la N-630, es un punto de encuentro clave para los vecinos, sobre todo en invierno, cuando la falta de actividad convierte el cierre del local en «como tener el pueblo apagado».
Por eso, la Junta Vecinal decidió ofrecer unas condiciones únicas: el nuevo gestor no tendrá que pagar ni alquiler, ni luz, ni gastos de calefacción o agua. «Asumimos todos los costes porque creemos que tener el bar abierto es fundamental para mantener la vida del pueblo», afirma Barrientos.
La rentabilidad como reto rural
Pese a esas facilidades, el pedáneo reconoce que la rentabilidad sigue siendo un reto. «Estamos en una zona con menos de 10.000 personas en un radio de 12 kilómetros, pero si el servicio es bueno, hay potencial. Lo difícil es encontrar a alguien dispuesto a venir a un pueblo pequeño», comenta.
Publicidad
Por eso, además del local, la Junta también contempla ayuda para el alojamiento y un pequeño apoyo económico durante los meses más duros del invierno.
El nuevo bar abrirá de forma inminente, con la intención de adaptarse al horario de los vecinos y convertirse en un punto de reunión diario. «Si no hay bar, no hay vida. Y eso aquí se nota mucho. Queremos volver a tener luces encendidas al caer la tarde», concluye Barrientos.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión