Reino Unido renuncia a reabrir escuelas antes del verano

La viñeta de Peter Brooks en 'The Times' dibuja a Boris Johnson llegando tarde a sucesivos autobuses con destinos a Confinamiento, Test, Equipamiento Médico, Residencias de Mayores, Escuelas,… 'The Sun' dice que «es una vergüenza para esta nación que se niegue la educación a los niños británicos». Matt, en el 'Daily Telegraph', dibuja a padre e hijo con una pinta en una mesa de jardín de un pub, con el segundo diciendo a su progenitor: «Bebo para olvidar la escuela». Los pubs abrirán antes de que las escuelas.

La decisión del Gobierno de renunciar a que los alumnos regresen a las escuelas antes del verano es otra decepción sobre su estrategia. El 1 de junio abrieron para los grupos de edad más pequeña. La mitad de los padres llevaron a sus hijos y el porcentaje habría aumentado. El plan para abrir las escuelas a otras edades ha sido ahora abandonado. «Está durmiendo al volante de su Ministerio», le reprochó una diputada al ministro de Educación, Gavin Williamson, cuando confirmó que no tiene un plan para la recuperación de la enseñanza perdida.

El problema es la falta de espacio en los colegios para reanudar la vida escolar cumpliendo las reglas de distanciamiento físico. En Reino Unido se adoptó la decisión de exigir un mínimo de dos metros. Y el jefe médico oficial, Chris Witty, ha insistido en sus manifestaciones públicas en que es imprescindible mantener esa distancia hasta que termine la epidemia.

La epidemia de coronavirus evoluciona de manera positiva en Francia, por lo que el Gobierno prepara ya el fin del estado de urgencia sanitaria, que ha regido la vida de los franceses durante el confinamiento y la desescalada. El primer ministro, Édouard Philippe, no quiere que se prolongue más allá del 10 de julio, como habían pedido diversas asociaciones de defensa de las libertades.

En vigor desde el 24 de marzo, el estado de urgencia ha otorgado al Ejecutivo amplios poderes para combatir la crisis del Covid-19. Un nuevo proyecto de ley vendrá a sustituirlo y dejará en manos del primer ministro «una parte de las herramientas» durante un periodo de cuatro meses.

El gabinete podrá seguir regulando el acceso a los transportes públicos y sus condiciones de uso, exigiendo, como ahora, el uso de mascarillas. También se reserva el derecho a limitar o prohibir ciertas aglomeraciones y de regular el cierre temporal de establecimientos abiertos al público, según el estado de las condiciones sanitarias. Sin embargo, no podrá volver a ordenar un confinamiento estricto en caso de que se produzca un rebrote de la epidemia. Para ello, necesitará un nuevo decreto del Consejo de Ministros.

También el Gobierno de Marruecos mantendrá hasta el 10 de julio el estado de emergencia sanitaria por la pandemia de la COVID-19, que cuenta en el país con 8.437 casos y 210 muertes. No obstante, contempla una reducción gradual de las restricciones impuestas desde el 20 de marzo, aunque se mantendrá el cierre de fronteras, lo que complica ahora mismo la operación anual de paso del Estrecho para los tres millones de personas que se mueven entre África y Europa en verano.

El ministro alemán de Exteriores, Horst Seehofer, anunció hoy la apertura de las fronteras alemanas a los países vecinos de Francia, Austria, Dinamarca y Suiza y la reactivación del acuerdo de libre circulación de personas de Schengen el próximo 15 de junio. Las fronteras con los tres estados del Benelux eran las únicas que se habían mantenido abiertas durante el tiempo de restricciones. Seehofer subrayó que había dado la orden a la Policía Federal, responsable de la seguridad en las fronteras germanas, de reducir hasta entonces poco a poco los controles aduaneros que aún se llevan a cabo y de abrir la totalidad de los accesos por carretera y ferrocarril a esos países vecinos. En el caso de que la situación «se vuelva a agravar contra todo pronóstico, tendremos que debatir en el consejo de ministros cómo actuar», dijo Seehofer, quien subrayó que con la reapertura de fronteras queda abolida también la orden de cuarentena de dos semanas para las personas que entran en Alemania procedentes de esos estados.

En el caso de España, la reactivación del acuerdo de Schengen se producirá una semana después, concretamente el 21 de junio. Seehofer subrayó que es en esa fecha cuando el gobierno de Madrid tiene intención de levantar sus controles fronterizos. «Actuamos de una manera recíproca», señaló el titular alemán de Interior, quien destacó que en ese caso la medida afecta sobre todo al tráfico aéreo entre los dos países. En lo que se refiere a terceros países, el gobierno alemán no decidirá cómo actuar hasta el miércoles próximo en su habitual consejo de ministros a media semana. Las restricciones vigentes se prolongan en todo caso hasta el final de mes de junio. Seehofer confirmó además que Alemania ampliará su alerta de viajes a 160 países fuera de la Unión Europea hasta el 31 de agosto, con lo que mantiene también cerradas sus fronteras a los nacionales de esos estados hasta esa misma fecha. El gabinete ministerial decidió que habrá excepciones con algunos estados que cumplan determinados criterios en relación con el desarrollo de las infecciones de coronavirus y la capacidad de sus sistemas sanitarios.

El jefe de la diplomacia alemana, Heiko Maas, señaló al respecto que, a diferencia de los vecinos europeos, en el resto del mundo «no se recaban aún datos básicos bajo criterios y análisis comparables que hagan posible un tráfico de viajeros sin riesgos incalculables». Maas comentó que pese a todo ese cierre fronterizo y la alerta de viajes a los países fuera de la Unión Europea se revisará periódicamente también de manera individual por estados, pero teniendo siempre en cuenta «la seguridad de los viajeros como criterio central».

Desde ayer martes, en Rusia se han producido 216 nuevas muertes a causa de la COVID-19, informa la célula de crisis del Gobierno ruso. La última vez que se superaron los 200 muertos en un día fue el pasado 29 de mayo, cuando se alcanzó el récord diario durante la pandemia con 232 fallecidos. Estos datos contrastan con la situación concreta de Moscú, en donde hoy se han registrado 56 nuevos decesos, tres menos que el día anterior, y tan sólo 1.195 nuevos contagios, la cifra más baja desde el pasado 11 de abril, cuando se produjeron 1.030 nuevos casos de coronavirus.

En lo que va de pandemia, en Rusia han perdido la vida por infección de coronavirus 6.358 personas sobre un total de 493.657 infectados. De esta forma, el país eslavo ocupa el tercer lugar en el mundo en número de casos detectados de Covid-19. Sin embargo,

en número de contagios por millón de habitantes (3.383) se sitúa en el puesto 34 de la lista global y en el de muertes por millón de habitantes (44) ocupa la casilla número 47, según la web Worldometers.

Tan baja mortalidad, según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, se debe «a la efectividad de nuestro de sistema sanitario». En declaraciones al canal estadounidense CNN, Peskov ha vuelto a negar que el Gobierno esté manipulando los datos relativos a la incidencia del coronavirus en el país.

No obstante, en la capital rusa por ejemplo, según fuentes del ZAGS (el registro civil ruso) consultadas por la radio Eco de Moscú, la mortalidad durante el mes de mayo fue «significativamente mayor que en años anteriores». En concreto, el mes pasado fallecieron en Moscú 15.700 personas, lo que supone «casi un 57% más con respecto a los tres años anteriores», porcentaje por encima del atribuido al coronavirus.

Pero ahora la situación en la principal ciudad rusa, al menos en lo que a contagios se refiere, parece mejorar. Desde ayer se han registrado en Moscú 1.195 nuevos casos de coronavirus, la cifra más baja desde el 11 de abril, cuando se detectaron 1.030 casos de Covid-19. El martes se reportaron 1.572 nuevos casos confirmados de la enfermedad.

En cuanto al número de dados de alta en la capital desde ayer se sitúa en 3.796 pacientes y suma ya un total de 113.533 curados desde el comienzo de la epidemia.

En el conjunto de Rusia han sido dados de alta en la últimas 24 horas 10.386 personas que dieron positivo en el test de coronavirus, lo que eleva el total a 252.783 curados, más de la mitad de los 493.657 infectados habidos hasta la fecha. Quedan todavía, por tanto, 234.516 casos activos.

Rusia ha acelerado la desescalada para favorecer la celebración del desfile de la victoria, el próximo 24 de junio, y la votación, el 1 de julio, de las enmiendas constitucionales para permitir al presidente Vladímir Putin seguir en el poder dos mandatos más, si así lo decidiera. Los habitantes de Moscú pudieron ayer salir libremente a la calle tras un confinamiento de casi dos meses y medio.