Martínez de la Rosa: «Japón no es el camino tradicional a la Formula 1, pero es una gran oportunidad para Vidales»

Es un camino que, décadas después, emuló Álex Palou – que ya ha estado a los mandos del McLaren en los primeros entrenamientos libres del GP de Las Vegas – y que intentará seguir un David Vidales que la próxima semana se 'juega' una plaza en el equipo B-Max para 2023 y disputar la Super Formula Light japonesa.

Martínez de la Rosa, ahora en los departamentos de márketing y comunicación de la escudería Aston Martin, donde volverá a coincidir con Fernando Alonso, ha confesado en conversación con leonoticias que la decisión del leonés David Vidales de apostar por Japón es «muy acertada».

«Es una gran oportunidad. En vez de tener que llegar con un patrocinador debajo del brazo, eres un piloto profesional, con un salario. Es un paso muy importante, puesto que únicamente te centras en pilotar y en estar en forma, no en buscar patrocinadores», ha explicado Martínez de la Rosa a leonoticias.

Reconoce que no es el camino tradicional para llegar a la Formula 1 pero «todos los caminos llevan a Roma y hay ocasiones en las que has de tomar direcciones que, a priori, no son las ideales». En este sentido, alaba la «iniciativa» del leonés de apostar por Japón y recuerda que siempre lo ha hecho: «Irse tan joven a Italia para triunfar en el karting ya era una muestra de su determinación».

Para el expiloto español de Formula 1 es una apuesta acertada porque «si tienes buenos resultados, vas a escalar seguro y, si no, te puedes volver a Europa». Y es que las principales salidas desde la Super Formula Light, tal y como explica Martínez de la Rosa, son los campeonatos de GT (Gran Turismo), muy populares en Japón o, incluso, la IndyCar estadounidense.

«Si eres competitivo, tienes diversas salidas y puedes irte a Estados Unidos, como Palou, y ahora tiene muchas opciones de llegar a la Formula 1 tarde o temprano», ha destacado.

Pedro Martínez de la Rosa ganó la entonces llamada Formula 3 japonesa en el año 1995, estuvo tres años en el país asiático y dio el salto en 1998 a Formula 1 como piloto probador para ser piloto oficial ya en 1999 en el equipo Arrows.

«Japón me lo dio todo porque pasé de no tener patrocionadores y estar con un pie fuera del deporte a competir al máximo allí o en el GP de Macao, que es un escaparate brutal e ir escalando ahí y en el Gran Turismo», ha indicado. Pilotando en distintas competiciones cada año, «yendo a carrera por fin de semana», logró «versatilidad y capacidad de adaptación» y, a la postre, ese soñado salto a la Formula 1.

«Y a nivel personal, me hizo madurar y crecer, ser un deportista más completo y más duro que, en Europa, estaba más protegido», ha apuntado.

Por ello, insiste en conversación con leonoticias en lo acertado de la decisión de Vidales de probar fortuna en Japón, al que aconseja «que resida allí». «Hay muchos pilotos que compiten el fin de semana y vuelven a Europa. Ese ir y venir no es beneficioso, te desconecta del día a día y te hace perder oportunidades de dejarte ver, de entrenar, de ir con el equipo, de mostrar que eres profesional... Allí quieren ver al piloto cada día, cuánta dedicación le pones... y eso te abre puertas. El que se queda todo el año en Japón suele ser aquel que tiene más hambre», ha justificado.

Por último, Martínez de la Rosa ve a David Vidales como un piloto con un talento «excepcional» que tiene que «explotar y progresar» en el mundo de los monoplazas como ya lo hizo en el karting. «Es un talentazo y Japón le va a venir muy bien para reengancharse en su camino a la Formula 1 o a la IndyCar. Tiene mucho recorrido y puede ser un piloto profesional», ha expresado.