El Abanca Ademar se queda a las puertas de Europa tras un final dramático

El peor final posible para un Abanca Ademar que peleó hasta el último minuto, lo tuvo en sus manos y acabó viendo como, una vez más, se le fue la victoria en el último segundo (30-29). Los de Dani Gordo llegaron al último minuto por delante en el marcador y en superioridad numérica, logrando un escenario firmado por todos antes de iniciarse el encuentro. Sin embargo, una gran intervención de Xoan Ledo y el gol del pivote leonés Javi García en el último minuto fue suficiente condena para los maristas.

De esta forma, el cuadro leonés, que de ganar hubiera alcanzado la cuarta posición tras la derrota de Bidasoa, cierra la competición en la sexta plaza, lo que obliga a aspirar a Europa por medio de la Copa. En el aspecto individual, Carlos Álvarez se despidió del Abanca Ademar con once goles que le sirven para empatar a Antonio García como máximo goleador de la categoría.

El duelo se presumía más reñido nunca entre dos conjuntos muy enchufados a lo largo de todo el campeonato y, sobre todo, en esta segunda vuelta. Con Europa en juego, el Abanca Ademar debía asaltar un feudo como el Palacio de Deportes de La Rioja, donde nadie había conseguido ganar hasta el momento a lo largo de toda la segunda vuelta.

Para ello, Dani Gordo optó por mantener una línea continuista respecto a los jugadores que saltaron de inicio frente al Atlético Valladolid, con la única novedad de Lindqvist en detrimento de Alberto Martín.

Desde el primer minuto, los maristas se encontraron con Xoan Ledo, portero con más paradas de la categoría, que se estrenó con una gran parada al lanzamiento del sueco. No empezó bien la contienda en clave leonesa, con un parcial inicial de 2-0 para los logroñeses. El cuadro local se mostraba mucho más agresivo en ataque y eso se tradujo en una máxima renta de tres goles (5-2).

No permitió tampoco el Abanca Ademar que la ventaja se mantuviera en el tiempo y los de Dani Gordo acortaron distancias (6-5). Andrej Pergel, sin embargo, sacó a relucir su lanzamiento exterior para convertir dos auténticos golazos y mantener a los riojanos por delante.

Cada vez que el Ciudad de Logroño abría brecha en el marcador, era Carlos Álvarez quien, por medio de su mejor versión, mantenía en pie al cuadro marista (8-7). El extremo, en su último partido con la elástica leonesa y metido de lleno en la pugna por ser el máximo goleador de la categoría, sumó seis tantos en poco más de diez minutos, hasta que una caída obligó al gallego a retirarse por problemas en el hombro.

Era un varapalo importante para los leoneses, que perdían, por suerte de forma momentánea, a su mayor exponente ofensivo, pero el equipo, lejos de amedrentarse, consiguió ponerse por delante por primera vez en el partido a través de un parcial 0-3 (9-10).

Solo cinco minutos tardó en volver el gallego a la pista, en medio de una doble exclusión al Abanca Ademar que tampoco logró aprovechar Ciudad de Logroño. Los de Dani Gordo se estaban sintiendo cada vez más cómodos en el encuentro, basando sus argumentos en el endurecimiento de la defensa, hasta tal punto que lograron una renta máxima de tres goles (10-13).

A pesar de ello, Logroño, demostrando su potencial como local, devolvió automáticamente el parcial de tres goles para empatar el duelo (13-13). La primera mitad acabó más cerrada, con las defensas más férreas, aunque esto no le vino mal al equipo leonés, que se fue al descanso por delante tras un primer acto de alto voltaje (15-16).

Era la tarde de los dos jugadores que se despedían y, junto a Carlos Álvarez, también destacó Marwan Hatem, que abrió el marcador leonés de la segunda mitad para colocarse con seis tantos en su casillero individual (16-17).

Ambos porteros se afinaron tras el descanso y convirtieron los primeros ataques en auténticas muestras de su potencial bajo palos, dejando claro por qué son dos de los mejores guardametas de la categoría. Aprovecharía el Abanca Ademar la expulsión de Rolando Uríos para volver a ponerse dos arriba (17-19), antes de convertirse el encuentro en un desfile de exclusiones para el cuadro leonés -Lindqvist, Marwan y la tercera, y por tanto descalificación, de Benites-.

Tuvo que jugar el conjunto de Dani Gordo con cinco jugadores durante dos minutos, algo que aprovecharían los locales para remontar la contienda con dos goles de su guardameta a portería vacía (21-20). Esto no fue motivo suficiente para dejar tocado a un equipo leonés que volvió a ponerse por delante con un parcial 0-3 (21-23), obligando a Miguel Velasco a parar el choque.

A falta de diez minutos para la conclusión, Saeid volvió a erigirse en el héroe marista para alcanzar su décima parada y mantener a los leoneses con su ventaja máxima de tres tantos en el luminoso (22-25). Sin embargo, una nueva exclusión para los maristas ayudó a Logroño a volver a firmar el empate y dejar todo abierto de cara a los últimos compases (25-25).

La exclusión de Xavi Tua a falta de poco más de un minuto dibujó un escenario idóneo para los maristas, que se vieron por delante y con superioridad numérica (28-29). Sin embargo, Ciudad de Logroño empató, Xoan Ledo consiguió evitar el tanto definitivo de Alberto Martín y, a falta de un segundo para la conclusión, Javi García puso el tanto de la victoria para los locales. El final más amargo posible para un Abanca Ademar que peleó hasta el final, pero no fue capaz de mantener el resultado (30-29).