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Una sanitaria sale a atender a las numerosas personas que hacen cola en un centro de salud de Madrid Efe
Sanidad impondrá el confinamiento de Madrid a pesar del rechazo de Ayuso

Sanidad impondrá el confinamiento de Madrid a pesar del rechazo de Ayuso

Madrid, Cataluña, Andalucía, Galicia, Murcia y Ceuta se oponen al proyecto pero Sanidad forzará las cuarentenas recurriendo al Plan de Respuesta Temprana y la Ley de Cohesión Sanitaria

Miércoles, 30 de septiembre 2020, 09:45

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Se acabaron los paños calientes. 'Manu militari' y aunque no exista el consenso que quería Salvador Illa. Cuarentena para 5 millones de madrileños. El Gobierno impondrá de forma inminente -«en los próximos días»- el confinamiento de la ciudad de Madrid y de sus nueve grandes municipios, a pesar del rechazo frontal de la medida por parte del Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso. Y no solo, también con la negativa de varias comunidades del PP y de Cataluña a avalar este proyecto que obliga a confinar a las grandes ciudades de España si las tasas de incidencia acumulada del virus en esos núcleos se desbocan por encima de los 500 casos por cada 100.000 habitantes.

Madrid, Cataluña, Andalucía, Galicia, Murcia y Ceuta votaron en contra esta tarde en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS)del proyecto exprés de Sanidad para poner en cuarentena a a la Comunidad de Madrid y acabar de una vez con todas con semanas de guerras abiertas entre Díaz Ayuso y Pedro Sánchez. Sin embargo, la falta de unanimidad en este foro solo tuvo consecuencias estéticas porque a Sanidad le bastaba con que el documento haya sido aprobado por mayoría, aunque ésta sea exigua, para hacerlo ejecutivo, según establece el Plan de Respuesta Temprana aprobado tras el fin del estado de alarma para gestionar los rebrotes de las nueva normalidad y la Ley de Cohesión Sanitaria.

«Vinculante»

«El acuerdo ha sido aprobado con amplia mayoría: 13 votos a favor, 1 abstención (Sanidad contó como abstención el voto de Murcia aunque el Gobierno de la región aseguró que fue en contra) y 5 en contra, y por tanto constituye una decisión colegiada del Sistema Nacional de Salud. «Lo han aprobado el 70% de los participantes», destacó Illa. «En los próximos días se publicará la decisión colegiada, que se plasmará en una orden del Ministerio de Sanidad que será publicada en el BOE», garantizó el ministro, al tiempo que recordó a la presidenta madrileña que esta disposición será «vinculante» para todas las autonomías, incluida Madrid, con independencia del sentido de su voto en el consejo de hoy.

De hecho, el Gobierno regional tendrá 48 horas para confinar los municipios de alta incidencia tras la publicación si no quiere arriesgarse a una intervención de mayor calado, como pudiera ser un artículo 155 de la Constitución.

El ministro de Sanidad, que el martes presumía de contar con el apoyo de gran parte de las autonomías, se llevó este miércoles una desagradable sorpresa, empezando por el hecho de que las propia Isabel Díaz Ayuso se había desmarcado del acuerdo que horas antes su número dos, Ignacio Aguado, había alcanzado con el propio Illa. La estupefacción del titular de Sanidad fue 'in crescendo' cuando constató que la Generalitat se había unido a buena parte de las comunidades gobernadas por el PP para hacer una pinza con el fin de no entregar el control de la pandemia en las grandes ciudades al Gobierno central. Solo las autonomías gobernadas por el PSOE, más el País Vasco y el Gobierno popular de Castilla y León votaron a favor.

Aturullado

Aunque solo algunas comunidades del PP y Cataluña se opusieron al plan de Illa, lo cierto es que el proyecto no convenció a ninguna comunidad al 100%. No tanto por el contenido, sino por las formas, lo confuso y lo aturullado de todo este proceso. Al final, lo que iba a ser poco más que un ardid jurídico para forzar a la Comunidad de Madrid a confinar a sus ciudades más castigadas por el virus, acabó por convertirse, de la noche a la mañana, en un improvisado manual contra la segunda oleada de la covid para toda España.

Y es que el plan redactado contrarreloj por Sanidad, obviamente, afecta de lleno a la Comunidad de Madrid con la prohibición de salida de los municipios de mayor incidencia y limitaciones de aforo en comercio y hostelería, principalmente, pero también obligará al resto de autonomías a estar muy vigilantes porque, como le va a ocurrir a Madrid, solo tendrán 48 horas para cerrar sus grandes ciudades de más de 100.000 vecinos en el caso de que éstas sobrepasen la temida barrera de los 500 casos de incidencia acumulada cada 100.00 habitantes; presentar una positividad en las PCR superior al 10%; y sufrir una ocupación de enfermos de la covid en las UCI superior a 35%.

El documento de Sanidad, que el Gobierno de Pedro Sánchez pretende en erigir sobre la marcha en un nueva guía para esta nueva normalidad plagada de rebrotes, deja de facto en papel mojado los otros planes elaborados por el Gobierno tras el fin del estado de alarma y que prometían a las comunidades total autonomía en la gestión siempre que no pidieran la ayuda del Gobierno central.

Encierro 'light'

En esencia, este nuevo protocolo copia el concepto de 'confinamiento light' inventado por el Gobierno de Ayuso hace unos días para los distritos madrileños más azotados por la pandemia; entierra las confusas zonas de salud como unidad de cuarentena; y apuesta por el gran aislamiento perimetral de los municipios más afectados, llegado el caso. Ciudades que serán sometidas a confinamientos mucho menos severos que los del estado de alarma hasta el punto de que los vecinos podrán moverse libremente por su término municipal y que, incluso, podrán esquivar los cierres si sus programas de rastreadores se muestran eficaces.

Así las cosas, la propuesta de Sanidad tendría su traducción inmediata en el confinamiento de casi 5 de los 6,7 millones de habitantes con los que cuenta la comunidad de Madrid. Son los vecinos de las diez grandes ciudades de la Comunidad de Madrid que cumplen con los requisitos impuestos por Sanidad para restringir movimientos. Se trata de Madrid (3.266.126 habitantes), Móstoles (209.184), Alcalá de Henares (195.649), Fuenlabrada (193.700), Leganés (189.861), Getafe (183.374), Alcorcón (170.514), Torrejón de Ardoz (131.376), Parla (130.124) y Alcobendas (117.040). En todas estas ciudades no solo se supera ampliamente la IA de 550 (de hecho en la capital de España, excepto Hortaleza, todos los distritos pasan de esa cifra), sino que presentan un 20% de positividad de PCR y un 41% ocupación Covid en UCI.

Los confinamientos selectivos con validez de una semana serán prorrogables tras el análisis de la evolución de la pandemia.

Libertad dentro del municipio

En esos municipios o en los que en el futuro alcancen esos parámetros, se limitan las reuniones a seis personas, se limitan los aforos en hostelería interior y comercio al 50% y al 60% en terrazas exteriores, se prohíbe el consumo en barra y se cierran los parques infantiles.

El proyecto, que deja claro que los vecinos de las zonas confinadas podrán moverse sin limitaciones dentro de su municipio siempre que respeten la distancia de seguridad, en esencia extiende a las grandes ciudades las normas que ya regían en las 45 zonas básicas sanitarias (ZBS) ya confinadas de Madrid, como, por ejemplo, que en esas urbes se limita a un tercio el aforo en los lugares de culto, se restringen los velatorios a quince personas en espacios al aire libre o diez en espacios cerrados, sean o no convivientes.

La hostelería, a la que Sanidad considera uno de los focos activos más importantes de transmisión del virus, tiene algunas normas adicionales: las mesas o agrupaciones de mesas deberán guardar una distancia de, al menos, 1,5 metros respecto a las sillas asignadas a las demás mesas o agrupaciones de mesas; la ocupación máxima será de seis personas por mesa o agrupación de mesas; y no podrán admitirse nuevos clientes a partir de las 22:00 horas y la hora de cierre no podrá superar las 23:00 horas, a excepción de servicios de entrega de comida a domicilio.

En las instalaciones deportivas el aforo será del 50% en interiores y del 60% en exteriores. Se recomienda evitar desplazamientos innecesarios en el municipio

Focos localizados

Sin embargo, las comunidades podrán evitar el confinamiento de sus grandes ciudades a pesar de que estas superen los listones de incidencia acumulada, positividad en PCR y ocupación en UVI. El cierre «no será de aplicación si al menos el 90% de los casos detectados en el municipio se corresponden con brotes no familiares perfectamente identificados y controlados, y si estos han sido convenientemente comunicados al Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias del Ministerio de Sanidad», recoge el texto, que premia así claramente el esfuerzo de rastreo de las comunidades.

En cualquier caso, el departamento que dirige Salvador Illa deja claro en su proyecto que la las condiciones recogidas en el acuerdo «constituyen un mínimo a aplicar por las comunidades autónomas» y que los ejecutivos autonómicos son libres de aplicar «otras medidas en el ejercicio de sus competencias».

«Todas estas medidas son necesarias para alcanzar el objetivo de controlar la expansión de la enfermedad y reducir la presión asistencial sobre el sistema sanitario, constituyen actuaciones proporcionales a la finalidad perseguida y están avaladas por razones y criterios de carácter epidemiológico y sanitario«, señala el borrador.

Pamplona

En principio, al margen de las grandes poblaciones de Madrid, ninguna de las otras 53 urbes españolas que alcanza los 100.000 habitantes superaría los parámetros establecidos por Sanidad y no se verían concernidas por estas medidas, según confirmaron hoy fuentes del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES). La única ciudad sobre la que habría dudas es Pamplona. La capital navarra, con 201.653 habitantes, es la única población fuera de Madrid que superaría el listón de los 500 (no hay datos públicos específicos sobre Pamplona pero la incidencia acumulada en la autonomía es de 685 positivos). La positividad (el porcentaje de casos detectados por las PCR) también está por encima del 10% en la comunidad foral, exactamente en un 11,3%. Sin embargo, la moderada presión hospitalaria 'salvaría' a Pamplona, ya que en la comunidad el porcentaje de ocupación de UCI por enfermos de covid está por debajo del 35%, exactamente se sitúa en un 22,5%.

Básicamente y a la vista de estos datos- admiten fuentes de los gobiernos central y madrileño- el acuerdo del martes fue una maniobra 'ad hoc' para poder confinar los grandes municipios de la comunidad evitando el «agravio comparativo» del que se quejaba Ayuso, pero también esquivando el riesgo de que el endurecimiento de las medidas en Madrid arrastrara a otros municipios o zonas de España que, con incidencias altas del virus, sin embargo no tienen tanta concentración de población ni tantos niveles de movilidad.

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