«Que se hable tanto del Reino de León debería ser una alarma para la Junta; el descontento crece»

Tres años desde que el cambio llegó a Ponferrada. Un cambio que ha obligado al nuevo alcalde a retorcer la agenda. Llamada por un lado, documento a firmar por otro y mucho movimiento en un despacho donde las puertas permanecen abiertas.

Olegario Ramón (Peranzanes, 1970) enciende la luz de su escritorio cuando nos acercamos. Pone luz sobre su mesa, quizá mostrando a los medios lo mismo que ha hecho desde su llegada al Ayuntamiento. Su templanza y búsqueda del consenso permitió al Partido Socialista volver a gestionar una ciudad que clama a las administraciones una sensibilidad especial, tal y como confiesa su regidor.

¿Qué balance hace de estos tres años al frente del Ayuntamiento de Ponferrada y tras más de dos décadas sin gobiernos socialistas?

Veníamos de un periodo muy largo de relaciones clientelares, redes endogámicas y estar en los medios, incluso nacionales, por cuestiones poco honorables. Lo primero fue poner orden en la casa, hacer desaparecer administraciones paralelas que había, como en deportes, turismo, o urbanismo, que no cumplía sus fines. También las relaciones instituciones estaban deterioradas. Tras ese primer orden, desarrollamos nuestro proyecto de ciudad verde, sostenible, humana, habitable y comprometida contra la violencia de genero y con la igualdad, en la línea de ciudades europeas. Han llegado fondos Next Generation, algunos importantes han sido seleccionados, y estamos solucionando problemas históricos: el contrato de transporte público estaba en situación ilegal desde 2012; y el de basuras, que fue firmado en 2014, era una ruina auténtica desde el punto de vista económico y de prestaciones de limpieza. Y en ello seguimos tras haber asentado las bases.

Uno de los pilares para la transformación de Ponferrada está siendo su apuesta por la digitalización. ¿Por ahí pasan las líneas de futuro de la ciudad?

El que no lo vea así es que está fuera de juego. Nos decían que eran ocurrencias y ahora somos seleccionados como una de las 20 Ciudades de la Innovación y la Ciencia. El hub tecnológico con la UNED, El Ponferrada City Lab para que las empresas testen productos en Ponferrada con dos antenas que dan cobertura a todos los sensores: ríos, aire, ruido... Tenemos quince convenios firmados, nueve con empresas y seis con administraciones y asociaciones, para aportar innovación, digitalización o turismo sostenible, con un plan de destino sostenible en Europa, con un proyecto bien elaborado.

¿Y no se planteó presentar candidatura a la Agencia Espacial a la que aspira León?

No nos lo hemos planteado. Sí que acudimos a esa convocatoria de Ciudad de la Innovación y la Ciencia y esperamos que el nuevo congreso, lo intentaremos, se celebre en Ponferrada; y en esa linea de congresos de turismo o patrimonio industrial vamos a continuar.

Ha realizado en las últimas fechas varios viajes a Bruselas, ¿qué está buscando allí?

Cuando hicimos el primer viaje fue a explicar proyectos y ver si iban en la linea de lo establecido por la Unión Europea. Expusimos el proyecto de sostenibilidad de turismo y nos vimos con una alta funcionaria. Vimos que íbamos por el buen camino. Nuestro plan va a ser enviado para ser uno de los ejemplos del resto de países europeos donde no se apuesta tanto por la sostenibilidad turística. Esta última visita ha tenido que ver más con lo cultural por una exposición de Enrique Gil, embajador y diplomático.

Precisamente, a través de los fondos Next Generation, se pretende desarrollar el anillo verde de Ponferrada. ¿Qué nos puede contar al respecto?

Es un proyecto estrella. Nos presentamos a proyectos europeos con la Red de Biodiversidad. Íbamos en unión a una fundación, Naturaleza y Hombre, y armamos un buen proyecto. Competíamos con ciudades de primer nivel, más grandes y equipos más importantes. Fuimos seleccionadas con ayudas con 2,2 millones, en un proyecto global de 2.450.000 euros, y una ciudad sostenible sobre la ribera de los dos ríos, con la Senda de los Romeros, la de los Compludos y la del Castillo de Templarios a Cornatel, sobre zonas degradadas de la ciudad, como el Plantío, el antiguo vertedero de campo, la zona de huertos urbanos o la montaña de carbón; se amplía la Rosaleda y se crea un anillo para caminar, correr, ir en bici... Todo para hacer una ciudad mucho más humana, saludable, vivible y que cuando uno se plantee dónde montar su proyecto de vida, Ponferrada estará en las ciudades principales para tomar esta decisión,

¿Para cuándo estaría lista?

Es un proyecto para tres años que se va a iniciar ya y acabar en tres años, pero no va a acabar ahí. Entiendo que cualquier equipo de gobierno lo va a hacer, pero ese proyecto se va a hacer y continuar y una vez que se vean bondades, el gobierno se va a ver obligado a continuar y mantener lo que se va hacer.

¿La oposición está siendo demasiado dura con este equipo de gobierno?

La oposición está en modo nacional. Está en el no por el no; cuanto peor, mejor; poner pegas a todo e incluso en el insulto. Creo que hay que demostrar responsabilidad y empezando por el principal partido de la oposición, que no quiere a Ponferrada. El PSOE, y el resto, queremos a Ponferrada. La oposición no quiere a Ponferrada, porque lo bueno habría que apoyarlo. Proyectos que ellos iniciaron, ahora lo llevamos a cabo, como un proyecto de anillo verde, y dicen que es superfluo. Tiene que echar una mano porque sino pierden la razón entre la ciudadanía. Yo voté más con ellos en la oposición y no me fue mal porque la gente valora echar una mano cuando algo es bueno para la ciudad.

Ellos -la oposición- han llegado a definir Ponferrada como «una ciudad en decadencia, abandonada, que sufre pérdida de población, económica y de empleo. ¿Tan mal está Ponferrada?

Hay un principal responsable que es el gobierno de la comunidad autónoma y por eso ocurre lo que está ocurriendo. Ponferrada está mejorando, creando empleo, no el alcalde, es una concatenación de esfuerzos y principalmente las administraciones y el ayuntamiento. Hemos adjudicado una actuación de acceso al polígono de La Llanada, donde está LM, y para la construcción de las torres eólicas de Emoby, que necesitaba mejores accesos y ya se ha adjudicado con total de 800.000 euros que servirán para mantener y crear empleo. En 22 años no se había gastado ni un solo céntimo. Somos los primeros que tomamos el problema y nos critican cuando no han hecho nada; eso es una sinrazón y así no se gana credibilidad.

¿Teme que este último año puede haber turbulencias en el tripartito?

Gobernamos con Podemos y Coalición. La lógica dice que habrá algún susto por reivindicar espacio de cada uno, pero no se va a romper el pacto porque está bien fundamentado. Algún susto habrá para que cada partido se desmarque y cobre protagonismo, pero no creo que corra peligro el pacto.

Recientemente se ha adjudicado el nuevo contrato del servicio de transporte urbano, ¿cómo valora el cambio?

El cambio ha sido espectacular. Teníamos una situación ilegal desde 2012, que beneficiaba al empresario con un servicio malísimo, pero que eran ingresos importantes para el empresario y nadie quiso arreglar. Que expliquen porqué no querían cambiar una situación de desventaja para la ciudad y ventajosa para el empresario. Teníamos autobuses que se caían y, en concreto, a los mas pequeños es les abrían las puertas en marcha. Teníamos 12, hemos renovado ocho y ahora lo haremos con dos más. Además, la tecnología y la innovación que es más avanzada. Es innegable, pero dirán que no. Es innegable que se ha solucionado un problema y mejorado un servicio.

¿La línea a seguir es hacia la municipalización total del servicio?

Esa es la idea, pero la realidad te pone donde te pone. Queríamos haber ido directos y hay que ir preparándonos antes porque no lo estábamos. Por eso yo siempre hablé de contratos puente, conocía el sentir y pensar de los técnicos. Dicen que incumplo mi promesa pero es falso; hablé de contratos puente. Nuestra voluntad es la gestión directa, lo hacemos ya con Parques y Jardines, lo hicimos con Recaudación y queremos con Recogida de Residuos y Limpieza Viaria y Transportes.

¿Pero tiene el Ayuntamiento capacidad económica para afrontar una municipalización?

El problema no es la capacidad, sino que es más barato y flexible que con un contrato no tienes. El problema es tener experiencia, instalaciones y medios y en eso estamos, para que cuando acabe el actual contrato podamos acudir a la gestión directa.

¿Y el de basuras? Ya tuvo una convocatoria de huelga sin haber entrado en vigor.

Finalmente hubo altura de miras y se alzó la convocatoria porque no había razones importantes con un contrato que va a entrar con un sistema de control mensual para la empresa y muchas mejoras. Ya hay una mejoría con la maquinaria adquirida, es evidente, pero hay interés especial en sembrar que es un desastre y no es cierto. Todavía tiene que mejorar bastante más.

Yo he venido de fuera y he recorrido hoy el centro de Ponferrada y lo he visto bastante limpio. Sin embargo, desde los barrios nos aseguran que allí no llega la limpieza.

Me alegra que me diga que ve la ciudad está limpia. Probablemente hay ciertos déficits derivados de un contrato desastroso: establecía y eliminaba la recogida diaria en barrios tan importantes como Flores del Sil y Cuatrovientos y todavía sale el autor de ese contrato a exigir. Usted abandonó esos barrios y la ciudad, tenga dignidad. Hay una mejora, pero tiene que ser mayor y ocurrirá con el nuevo contrato.

También hay en marcha un proyecto de red de calor que se ha encontrado con los tribunales.

Se judicializó. Los demandantes ganaron el pleito y y TSJCyL dice que el procedimiento no se hizo bien, pero no por no poder instalarse sino por falta de criterios de publicidad. Estamos en los últimos trámites del nuevo procedimiento y hemos ido a la declaración medioambiental, mucho más exigente, que ya está; y también a un plan general para establecer redes de calor en la ciudad que no existía. Esto era un desorden absoluto y ahora hay condiciones para que se conozcan y establecer medios.

¿Cuándo podría entrar en vigor este plan de red de calor?

Hay unos requisitos a cumplir, las licencias son regladas y si no lo haces incurres en responsabilidad patrimonial de cinco millones de euros o cosas peores; es que la licencia no la da el alcalde porque le da la gana, son actos reglados. En tres o cuatro meses eso tendría que estar finalizado.

¿Va a seguir apostando por los barrios?

Eso es principal, hay que apostar por eso y por los pueblos. Yo llegué a Ponferrada con 13 años, nací y me crié en un pueblo que no pasa de 30 habitantes. La apuesta por los barrios y el medio rural va a estar en los ejes principales de la acción de gobierno.

¿Es Ponferrada una ciudad abandonada por la Junta y el Gobierno? ¿Han pagado el compromiso que establecieron con esta ciudad?

Por parte de ambas administraciones, el compromiso es insuficiente sin duda. Es estar en la periferia de la periferia y tiene sus consecuencias. Cuando se habla tanto de volver al Reino de León y una comunidad autónoma, algo que es inviable a corto y medio plazo, pero es una alerta, una alarma que la Junta debería tener en cuenta. Oiga, tengo un problema en El Bierzo que está sufriendo más que otros territorios; téngalo en cuenta con la enseñanza, sanidad o atención a mayores porque sino esa sensación de olvido y de querer ir a otro estatus se va a ir incrementado y parece que la Junta no lo ve. Y el Gobierno tiene que tener otra implicación; es fundamental entrar en eje atlántico y nuestro ramal y es importante la A-76, que avance esa conexión, más de manifiesto aún con el problema del viaducto de Castro.

¿Comprende por lo tanto la ola autonomista de León y que ésta se esté ampliando a más municipios de la provincia?

Me preocupa solucionar los problemas de la gente, no generar falsas expectativas que, en el mejor de los casos, las soluciones serian de aquí a varios años. Debe tener en cuenta la Junta que el descontento crece y servirle de alarma para que esas grandes diferencias se vean reducidas. Es una alarma que la Junta no acaba de ver.

¿A qué proyectos se puede agarrar Ponferrada para mirar con optimismo al futuro?

Dos cosas del Gobierno nacional: con el eje ferroviario del Atlántico y A-76. Los fondos de transición justa tienen que empezar a crear más empleo, tienen que crear más, y la oportunidad de los Next Generation es algo sin precedentes y hay que aprovecharlo porque no volverá a ocurrir. Por eso nosotros empezamos a trabajar con un equipo creado para ir a esos fondos. Los fondos que nos han concedido ya son 6,6 millones, pero estamos pendientes de otros seis en sostenibilidad turística, cuatro que presentaremos al Instituto de Transición para el complemento del bosque urbano; e iremos a un tema de comercio. Hay que coger ese tren porque no va a volver a pasar y hay que aprovechar las oportunidades ligadas al territorio. No podemos ser buenos en algo que no tenemos recursos. Y creer en nosotros mismos e implicar a todo el mundo, desde la administración hasta el último ciudadano. Que cuando toma una decisión, lo haga pensando en el colectivo del Bierzo.

¿Le queda cuerda a Olegario para renovar el mandato por cuatro años en 2023?

Sí, tengo la intención de encabezar la lista del PSOE, al que pertenezco desde hace más de 30 años, y sí, aspiro a ello. La palabra la tiene la ciudadanía, quien valora lo que ha ocurrido, lo que ocurrió antes y tomará la decisión oportuna.

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