Villa niega haberse llevado dinero del sindicato y dice que alguna firma no es suya
El exsecretario general del SOMA ha declarado ante la jueza de manera «contundente» y «coherente», según ha explicado el abogado de Pedro Castillejo
ANA MORIYÓN
Viernes, 3 de marzo 2017, 13:18
Ha sido «contudente» y «coherente». Son los dos calificativos otorgados por Alfredo García, abogado del presidente de la Fundación Infide, Pedro Castillejo, a la declaración realizada esta mañana por el exsecretario general del SOMA ante la jueza. José Ángel Fernández Villa, según informó el gabinete de prensa del TSJA, sólo ha contestado a las preguntas de su defensa, en una declaración que comenzó pasadas las diez de la mañana y que concluyó a las doce menos diez, pero que tuvo receso de 20 minutos. También desde el juzgado se ha informado de que «el investigado ha contestado a cuantas preguntas se le han formulado de forma coherente». En su declaración, Villa, que ya ha abandonado los juzgados, ha negado haberse llevado dinero del sindicato e, incluso, rechaza que alguna de las firmas que aparecen en los papeles del caso sea suya, según Alfredo García. Y para demostrarlo, se le ha practicado a continuación una prueba pericial.
Publicidad
«El interrogatorio, como estaba previsto, se ha ceñido al Fundamento de Derecho Uno del Auto dictado por la magistrada el 21 de diciembre pasado, por el que se declaraba al investigado como apto para declarar. Así se han adaptado a la capacidad actual de comprensión de lenguaje del Sr. Fernández Villa«, explica el comunicado. También se especifica que se le han formulado «preguntas simples y de respuesta sencilla» y que «se ha garantizando el tiempo para la respuesta y se ha velado por la práctica de las interrupciones pertinentes que permitieran el descanso mental del compareciente».
El exsecretario general del sindicato minero SOMA-Fitag-UGT y exsenador del PSOE, José Ángel Fernández Villa, llegaba pasadas las diez de la mañana al Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo, para prestar declaración por la causa abierta por el SOMA-Fitag-UGT y la Fundación Infide relativa a un supuesto delito de apropiación indebida. El histórico líder minero llegó en taxi hasta las dependencias judiciales y entró en el juzgado por su propio pie, ayudado por un bastón y flanqueado por su abogada, Ana Boto, y por su mujer. Su llegada estuvo rodeada de algunos gritos de personas que le llamaron «sinvergüenza» y «ladrón».
Ante preguntas de los periodistas sobre su estado de salud, la letrada no quiso que Villa contestara y amenazó con «dar mandobles con la cartera» y llamar a la Policía si no se permitía avanzar, una amenaza que quedó en nada. Fernández Villa tendría que haber declarado el pasado 11 de enero, pero su defensa alegó entonces motivos de salud para eludir la comparecencia. Sin embargo, la Audiencia Provincial desestimó el recurso presentado por Fernández Villa, con el que pretendía no declarar en la causa.
Si no hubiese acudido ni presentado causa legítima que se lo impidiese, la orden de comparecencia podría haberse convertido en orden de detención, según ha informado el juzgado. La juez que lleva el caso considera que los padecimientos del exsindicalista, que fue en su día todo un referente en el sector minero no le impiden en absoluto declarar en calidad de investigado en la fase de instrucción.
Publicidad
La jueza Simonet Quelle Coto no ha tenido en consideración las peticiones de la defensa del exsecretario general del SOMA que, hasta el último momento, ha tratado de que la magistrada adopte medidas especiales alegando la «situación de vulnerabilidad» en la que, insiste, se encuentra el exsindicalista como consecuencia de la demencia que tiene diagnosticada.
Los abogados de la acusación, Luis Llanes Llanes y Miguel Garcia Vigil, manifestaron a la salida del juzgado que la declaración de José Ángel Fernández Villa es un "triunfo" del Estado derecho y que, con ella, se ha "confirmado" que el acusado estaba "en perfecto estado" para ser interrogado. No obstante, entienden que sus explicaciones fueron insuficientes porque no ha aclarado las "irregularidades" detectadas en la contabilidad del sindicato SOMA, siendo él su máximo dirigente. "No acepta los hechos ni tampoco da explicaciones", manifestaron.
Publicidad
Impresión muy diferente fue la que se llevó el abogado de Pedro Castillejo, el otro imputado en la causa. Alfredo García López también subrayó que Villa declaró con lucidez y vehemencia, pero considera que aportó "mucha luz". Según García López, Villa no solo negó los hechos de los que se le acusa, sino que dio detalles para justificar su defensa e, incluso, se mostró molestó en relación con algunos gastos que se le atribuyeron, como la compra de ramos de rosas, que enmarcó en una tradición minera. También negó que algunas de las firmas utilizadas para realizar alguno de estos pagos fueran suyas, motivo por el que se le hizo una prueba pericial una vez concluida la declaración.
El histórico líder minero, acusado ahora por el que fuera su sindicato de apropiarse ilícitamente de 420.000 euros, deberá personarse en el juzgado a las diez de la mañana para someterse al interrogatorio que, atendiendo a las recomendaciones médicas del perito que le exploró en su domicilio y que determinó que sí estaba en condiciones mentales para someterse a una comparecencia judicial, no debería prolongarse durante mucho tiempo y debería constituirse de preguntas cortas y sencillas.
Publicidad
La magistrada ha denegado, sin embargo, la solicitud de su abogada, Ana García Boto, para que se adopten «medidas legales específicas» que, según argumenta la letrada en su último escrito, están previstas en la legislación europea «para auxiliar (al investigado) en la vulnerabilidad que presenta». En concreto, la defensa requirió al juzgado que designara a su cliente «una persona adulta como responsable para que le acompañe en el interrogatorio», así como la presencia en el mismo del médico forense «para que pueda controlar su estado de vulnerabilidad desde el punto de vista médico» y «aconsejar lo que sea procedente de forma que no se someta al investigado a un trato inhumano ni degradante desde el punto de vista médico-procesal». La abogada argumenta en su escrito que las condiciones mentales de su cliente le impiden analizar junto a él la documentación del caso y tilda de «quimera» que Villa pueda asumir su defensa. Pero la magistrada ha sido muy tajante al respecto y en su providencia, trasladada ayer a las partes, sostiene que «no ha lugar» a estas solicitudes «al carecer tales peticiones de cobertura legal». La defensa de Villa reclamó además, también sin éxito, retrasar el inicio de la comparecencia unos minutos aduciendo nuevamente problemas propios de agenda, así como medidas especiales para evitar que se divulgue la imagen o la voz de su cliente que se tomen en la grabación audiovisual de la diligencia.
Servicio de ambulancia
Lo que no ha solicitado en esta ocasión la letrada, al contrario de lo ocurrido en otras ocasiones, es ningún tipo de medida especial para el desplazamiento de Villa desde su domicilio en La Florida hasta la sede judicial -en otras ocasiones se llegó a pedir el servicio de una ambulancia- ni tampoco para evitar que se puedan captar imágenes de su cliente a la entrada de la sede judicial -motivo por el que la letrada requirió en su día que la exploración médica se realizara en el domicilio del acusado-.
Publicidad
La titular del juzgado citó por primera vez a declarar al exlíder sindical en relación con la denuncia interpuesta por el sindicato SOMA en enero de 2016, pero su representante legal excusó su incomparecencia por motivos de salud, presentando un informe médico en el que quedaba reflejado un deterioro cognitivo. El exsindicalista fue sometido a petición de la acusación a una exploración médica a cargo de un experto en neurología, Alfredo Robles, que determinó que el exlíder «exagera» conscientemente algunos de los trastornos y que, pese a sus limitaciones mentales, tiene capacidad para enfrentarse a un interrogatorio. La nueva citación, fijada inicialmente para el pasado 12 de enero, fue impugnada por la defensa al considerar que no se ajustaba a derecho, si bien la Audiencia Provincial avaló finalmente la decisión de la jueza. Ahora, dada la trayectoria de incomparecencias, recursos y otro tipo de «maniobras dilatorias» -en palabra de la propia magistrada- que se han ido sucediendo en esta instrucción, la jueza advierte de que si Villa no se presentase ni justifica la causa, «la orden de comparecencia podrá convertirse en orden de detención».
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión