Los suizos votan una nueva ley sobre el clima en medio del deshielo de glaciares
Los defensores de la «Ley Federal Sobre Metas de Protección Climática, Innovación y Fortalecimiento de la Seguridad Energética» sostienen que es necesaria
Los suizos, que sienten el impacto del calentamiento global en el acelerado deshielo de sus glaciares, votaban este domingo sobre una nueva ley climática que busca conducir al país a la neutralidad de carbono.
Encuestas recientes reflejan un fuerte apoyo a la propuesta, que llevaría a Suiza a reducir su dependencia del petróleo y el gas importados y aumentar el uso de alternativas verdes y locales. La legislación apunta a que Suiza alcance la neutralidad de carbono para 2050.
Pero el apoyo declinó en el último sondeo de gfs.bern a 63%, entre advertencias del derechista Partido Popular Suizo (UDC) de que esa ley podría dañar a la economía. Los centros de votación abrirán por pocas horas la mañana del domingo y cerrarán a mediodía (10H00 GMT).
Gran parte de los votos suelen ser emitidos por adelantado en las causas más populares del sistema suizo de democracia directa, y los resultados iniciales se esperan para la tarde.
Los defensores de la «Ley Federal Sobre Metas de Protección Climática, Innovación y Fortalecimiento de la Seguridad Energética» sostienen que es necesaria para garantizar la seguridad energética.
Aseguran que ayudará a abordar el impacto del cambio climático, evidenciado por el dramático deshielo de los glaciares de los Alpes suizos, que han perdido un tercio de su volumen entre 2001 y 2022.
Suiza importa alrededor de tres cuartas partes de su energía, incluido todo su petróleo y gas natural.
Activistas climáticos inicialmente presionaron por una prohibición total del consumo de petróleo y gas para 2050 en Suiza.
Pero el gobierno elaboró una contrapuesta que descartó la prohibición pero incluyó algunos elementos de la iniciativa original.
El texto propone apoyo financiero de 2.000 millones de francos suizos (USD 2.200 millones) en una década para promover la sustitución de la calefacción a gas o petróleo con alternativas amigables con el clima, así como ayuda para que las empresas avancen hacia innovaciones verdes.
Casi todos los partidos grandes suizos apoyan el proyecto salvo el UDC, el mayor del país.
Esa agrupación asegura que la meta de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050 implicaría en la práctica una prohibición de los combustibles fósiles, que a su juicio pondría en riesgo el acceso energética y encarecería la electricidad.
El líder del UDC, Marco Chiesa, calificó como «utópico» el proyecto y advirtió que aumentará el costo de la energía sin «ningún impacto» sobre el clima mundial.
El partido ha tenido éxito en el pasado promoviendo este tipo de mensajes.
En 2021 logró impedir la aprobación de una ley que habría reducido las emisiones de gases causantes del calentamiento global.
Pero observadores señalan que esta vez será difícil, ante el esfuerzo suizo por reducir su dependencia de fuentes energéticas foráneas tras la invasión rusa a Ucrania.
Los suizos también podrán votar el domingo sobre un aumento en el impuesto a las grandes empresas.
El gobierno quiere modificar la constitución para que Suiza pueda entrar a un acuerdo internacional encabezado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) que busca una tasa global mínima de 15% para las corporaciones multinacionales.
La última encuesta de opinión indica que 73% de los suizos apoyan el plan, que impondría la tasa a todas las compañías suizas con ingresos anuales de más de 800 millones de dólares.
Varios de los 26 cantones suizos tienen algunas de las tasas de impuestos corporativos más bajas del mundo, las cuales consideran necesarias para atraer empresas dados los altos salarios en el país.