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Marta Ortega y Carlos Torretta. Foto: Peter Lindbergh | Vídeo: EP

La heredera del imperio Inditex se casa con Valentino

La Coruña arropa a Marta Ortega y Carlos Torretta en su enlace, digno de alfombra roja

Gloria Salgado y agencias

Madrid

Sábado, 17 de noviembre 2018, 07:40

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El enlace de la heredera del imperio Inditex podría haber sido el evento del año si no fuese porque Meghan Markle se adelantó. Poco tienen que envidiar a la boda real británica Marta Ortega y Carlos Torretta, que se dieron el 'sí, quiero' este viernes en el domicilio familiar de la novia en La Coruña, a la que solo acudieron medio centenar de familiares y amigos íntimos.

No nos vamos a engañar. Todos los ojos estaban puestos en el atuendo de la novia, que se casaba en segundas nupcias tras la discreta boda de 2012 con el jinete asturiano Sergio Álvarez Moya, con el que tiene un hijo. En aquel momento optó por un vestido de corte clásico de su amigo Narciso Rodriguez -que acudió ayer a la fiesta-. Una imagen que ha quedado totalmente relegada con el maravilloso traje que escogió ayer -en esto sí gana por goleada a Meghan-: un elegante y romántico diseño exclusivo del director creativo de Valentino, Pierpaolo Piccioli, que ha inmortalizado el prestigioso fotógrafo Peter Lindbergh.

«Con este diseño he querido transmitir un imaginario con un inusual sentido de romanticismo, lleno de ligereza, frescura e intención para ilustrar su fuerte personalidad»

Pierpaolo Piccioli, director creativo de valentino

La firma italiana estaba entre las primeras en las apuestas porque Marta Ortega acudió a su último desfile en la Semana de la Alta Costura de París. «A través de este diseño he querido transmitir un imaginario con un inusual sentido de romanticismo, lleno de ligereza, frescura e intención para ilustrar su fuerte personalidad», explicó el diseñador. Se trata de un vestido rosa suave con la parte de arriba en forma de camisa de gasa plisada de cuello cisne y una falda ceñida la cintura con bolsillos y pinzas que simulan un pantalón. En los zapatos de salón a tono con el vestido y el velo sujeto con flores a conjunto con el ramo estaba el punto clásico. Del maquillaje y la peluquería se encargó Pablo Iglesias, el favorito de estrellas como Penélope Cruz.

Massimo Dutti se encargó de vestir a los pajes, entre ellos el hijo de la novia, Amancio, y a los testigos por parte de Ortega.

Marta Ortega.
Marta Ortega. Peter Lindbergh

Un vestuario magistral que dejó en casa para enfundarse otro Valentino con el que acudir a la celebración en el Real Club Náutico de La Coruña, frente al que se congregaron más de medio millar de vecinos para arropar a la pareja y unos 400 invitados. Los allí presentes recibieron con aplausos y gritos de «vivan los novios» al recién estrenado matrimonio cuando, al filo de las 21.20 horas, los dos se presentaron en un vehículo con los cristales tintados que les dejó frente al edificio para que recorriesen de la mano los metros que les separaban de la entrada, donde posaron ante la prensa antes de sumarse a su fiesta.

Optó por el negro del traje de chaqueta tipo esmoquin de Valentino con pantalones culotte y una blusa transparente para el cóctel. Eso sí, las discreta joyas de la ceremonia dieron paso a unos espectaculares pendientes en la noche. Torretta mantuvo su apuesta por el traje azul medianoche a medida de Savile Row, pero sin corbata. Un paseo adornado con velas guió el camino de los dos, y también de los invitados, al interior del edificio en una noche con una temperatura agradable, rozando los quince grados, y sin apenas viento, algo poco habitual en estas fechas, cuando el nordeste suele refrescar esta ciudad gallega.

Los primeros en aparecer fueron el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y su pareja, la ex ejecutiva de Inditex Eva Cárdenas. Instantes después lo hizo el presidente del grupo Inditex, Pablo Isla. Acto seguido hizo acto de presencia el padre del novio, el diseñador Roberto Torretta y, minutos más tarde, Amancio Ortega y su esposa, Flora Pérez, padres de la novia, quienes fueron aclamados por la multitud.

No podían faltar Eugenia Silva -una de las mejor vestidas- con su marido Alfonso de Borbón. Fue en una fiesta en su casa donde se conocieron los novios. Tampoco se perdieron el evento la modelo Jon Kortajarena; el fotógrafo Marco Severini -exmarido de Nieves Álvarez-, Alonso Aznar, Carlos Cortina Lapique, Rosauro Varo y Amaia Salamanca -con un estilsimo poco adecuado para una boda-; Rafael Medina y su mujer,la elegante Laura Vecino; una llamativa Samantha Vallejo-Nágera y su gran amiga Athina Onassis. No pudo acudir Carlota Casiraghi por su reciente maternidad.

Marta Ortega y Carlos Torretta a su llegada al Real Club Náutico de La Coruña.
Marta Ortega y Carlos Torretta a su llegada al Real Club Náutico de La Coruña. Efe

No en vano, como lo culinario importa y mucho, mientras que por la mañana el estrella Michelin Pepe Solla fue el encargado de preparar el almuerzo para los invitados -croquetas, jamón, carneiro (una especie de bivalvo) y merluza del pincho de Celeiro, según informa La Voz de Galicia-, el cóctel de la tarde corrió a cargo de dos restauradores de renombre: el gallego Javier Olleros, del restaurante Culler de Pau, en O Grove (Pontevedra), y Ricardo Sanz, de Kabuki, en Madrid. A pesar de que se desconocen los detalles del cóctel, la familia ha destacado el protagonismo de los vinos blancos en el menú. Mientras, el ambiente musical de la fiesta, otro habitual en toda boda, estuvo en manos de tres grupos de jóvenes artistas: The Bluebirds, Watermat y Sam French.

El Real Club Náutico de La Coruña, reservado por los Ortega durante todo el viernes por 25.000 euros-aunque se rumorea que ha desembolsado 3.000 euros más para compensar las molestias-, fue un hervidero en los últimos días, en los que se ha acondicionado el edificio para que estuviese «vestido de gala» ante la celebración de una de las bodas del año. Durante estos días se puso una decoración con motivos vegetales ideada por el francés Thierry Boutemy, al que ya recurrió en su primer enlace, que también confeccionó el ramo de novia. «Una referencia a Marta, a su sensibilidad natural y su conexión con la naturaleza», explicó sobre su trabajo Boutemy.

La fiesta continuará este sábado ya fuera de la ciudad, en el Centro Hípico Casas Novas, propiedad de los Ortega y situado en el municipio coruñés de Arteixo, donde se pondrá el broche de oro a uno de los acontecimientos del año.

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