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Consejos para hacer una mudanza con éxito en pleno agosto

Consejos para hacer una mudanza con éxito en pleno agosto

Mientras que para muchos es el mes del descanso y de las vacaciones, para quienes tienen que planificar y ejecutar un traslado de vivienda puede resultar el período más indicado

pisos.com

Jueves, 5 de agosto 2021, 07:24

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En ciudades costeras o de montaña, agosto es sinónimo de turismo y vacaciones. El mes en el que sus calles, tranquilas durante el resto del año, se llenan de vida y de todo tipo de actividades. En cambio, localidades medianas o grandes que no suelen ser destino predilecto de los viajeros de verano, disfrutan a lo largo de estas semanas de una tranquilidad especial, sin agobios, atascos, colas, sitios con aforos completos, etc.

En este último tipo de ciudades, no existe mejor mes que agosto para quienes tienen el siempre complicado y estresante proyecto de cambiar de residencia. Sin duda, los desplazamientos entre los diferentes puntos resultarán mucho más rápidos y fluidos, será mucho más fácil conseguir sitios de aparcamiento y las incomodidades o molestias que generan las mudanzas afectarán a muchos menos vecinos, ya que lo normal es que gran parte de ellos estén fuera de casa.

Planificar la mudanza con tiempo

Así como agosto nos brinda todas las comodidades para realizar una mudanza con éxito en ciudades no demasiado turísticas durante el verano, también hay que ser conscientes de que es el mes en el que muchas empresas bajan sus persianas para dar descanso a su personal.

Por eso, si la idea es contratar los servicios de una empresa de este sector, lo más recomendable es planificarlo con bastante antelación, elegir el proveedor que mejor se adapte a las necesidades y presupuesto y cerrar el acuerdo con tiempo. Evitaremos así sorpresas o prisas de tener que realizar elecciones de último momento y con un abanico de ofertas de precios y fechas mucho más reducido.

Las jornadas intensivas de trabajo de las que muchos trabajadores disfrutan durante este mes también es otro punto a favor del tiempo que se le podrá dedicar tanto a las tareas de organización, planificación y embalaje previas, como al desarrollo del propio traslado y posterior puesta a punto de todo el mobiliario y demás objetos mudados.

Cuando quienes se mudan son familias con niños, el hecho de estar en etapa de vacaciones escolares les permitirá a los pequeños adaptarse con más tranquilidad y sosiego a la novedosa situación y disfrutar del nuevo hogar durante más horas. A pesar de que el año comienza en enero, para todos los habitantes del hemisferio norte, el periodo tras las vacaciones estivales es equivalente a un nuevo comienzo del año. La mudanza implica de alguna forma una nueva vida que encaja a la perfección en este punto del calendario.

Evitar las horas de más calor

Los días de agosto todavía son muy largos y ofrecen muchas horas de luz natural. Sin embargo, puede ser también el mes de calor más asfixiante. Es importante entonces, dentro de la planificación de la mudanza, programar los traslados y las cargas y descargas de los objetos de mayor envergadura durante los momentos más frescos del día: o bien a primera hora, o cuando el sol ya empieza a caer.

Por supuesto, este consejo tiene que ir de la mano o no contradecir las normas vigentes en los sitios implicados en la mudanza. Una de las prioridades es consultar los días y horas permitidas para realizar mudanzas tanto en edificios o urbanizaciones como en ayuntamientos.

Tratándose de la temporada estival, otra recomendación a considerar es embalar por separado y etiquetar de una forma muy visible, tanto la ropa como los utensilios de cocina más utilizados en esta época del año, algo que facilitará bastante la rutina familiar a lo largo de los primeros días en la nueva casa, entre cajas, maletas y bolsos que pulularán por todas las habitaciones.

Si en la casa nueva hay que poner algún tipo de sistema de climatización, lo mejor será colocarlo primero en la agenda de tareas a realizar para evitar incomodidades. Un ejemplo puede ser la instalación de ventiladores de techo.

No está de más recordar un consejo válido para todo tipo de mudanza: aprovechar la ocasión para deshacernos de todas aquellas cosas que llevamos años sin usar: ropa, aparatos, objetos de decoración, herramientas, cosméticos, productos de limpieza y más.

Mudarse implica siempre un alto grado de estrés por todo lo que conlleva e implica. Hacerlo con éxito en pleno agosto y con los menores inconvenientes posibles depende de una correcta planificación, organización y ejecución que se pueden conseguir atendiendo a algunos de estos consejos.

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