El Prieto Picudo se sirve en Pajares de los Oteros

Ya van veinticuatro ediciones y tampoco se espera que sea la última. Un año más Pajares de los Oteros hará gala de los mejores vinos Tierra de León. La XXIV Feria del Vino Prieto Picudo se ha consolidado con el paso de los años, una consecución que no hace más que crecer en número de asistentes, una situación que como afirma Julio César Fernández, alcalde del municipio hecho que algún año se hayan «sentido desbordados en cuanto al número de asistentes».

«Potenciar el Prieto Picudo y transmitir la cultura de la bodega», así ha resumido Julio el objetivo de la cita. Más de diez bodegas participarán los días 19,20 y 21 de agosto en la cuna de uno de los vinos de la Denominación de Origen Tierra de León. Los bodegueros también se sienten entusiasmados con esta feria tal y como afirma el alcalde de Pajares de los Oteros que recordaba que con el festejo «se transmitirá a los visitantes la excelencia de sus caldos».

No solo el vino será el protagonista a lo largo del fin de semana. Partido infantil de fútbol, paella popular, tiro al plato, parrillada o verbena serán actividades presentes en los tres días de fiesta de la localidad leonesa.

Las previsiones para el evento son más que buenas. «Esperamos recibir entre 10.000 y 20.000 personas», pronostica Julio. El número de visitantes no ha parado de crecer, una cifra que «ha aumentado durante los tres últimos años».

La fiesta permitirá recordar «la labor realizada por los bodegueros, en los viñedos y en la producción de vino» así como «trasladar la excelencia de los caldos elaborados en Pajares de los Oteros a todos aquellos que se acercan a la feria».

Una feria etnológica que no ha parado de reinventarse desde su creación. Este año «los padres podrán degustar cualquier vino en la feria mientras los niños disfrutan en el parque infantil instalado en la localidad», apunta el alcalde.

Edición tras edición Pajares de los Oteros ha pasado a ocupar un puesto privilegiado en la escala de producción del Prieto Picudo, un caldo que se «pondrá en valor» durante un fin de semana con tintes de sabor a vino.