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El candidato a la presidencia de la Junta de Castilla y León por Ciudadanos, Francisco Igea

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El candidato a la presidencia de la Junta de Castilla y León por Ciudadanos, Francisco Igea Dos Santos

Francisco Igea: «La próxima semana presentaremos al PSOE una reforma exprés y urgente para eliminar los aforamientos y luego abriremos otra hasta donde sea posible»

El futuro vicepresidente de la Junta sostiene que no ha sido obligado a un acuerdo con el PP, que no ha faltado a la palabra dada y que visto lo ocurrido con los socialistas, cada día está «más convencido de la estrategia general de Ciudadanos»

S. Calleja

Sábado, 13 de julio 2019, 12:34

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El hombre díscolo de Cs con el paso de los días está más tranquilo y convencido de que ha acertado con su socio de gobierno, el PP, con quien se ha casado por conveniencia y todo pese a ser uno de los que abrió el debate en la Ejecutiva de su partido para estudiar la posibilidad de acuerdos con el PSOE. Lo dice tras ver una «estrategia de inmovilismo absoluto» en España y en Castilla y León, donde observa a un Partido Socialista «volver a ponerse en la tumbona, como lleva 37 años, esperando a ver si le cae el gobierno». En estas semanas para el pacto, en las que Franciso Igea Arisqueta (Valladolid, 1964) se ha sentido libre, porque «libre es quien toma decisiones y las asume», ha sentido el apoyo del partido, que son sus militantes, pero también ha sufrido en lo personal, cuando le «han escupido» en la calle y en redes sociales. Consciente de que la política es así, que no siempre llueve a gusto de todos, y de que si uno se la toma en serio ser iría a casa todos los días, resume el oficio con la palabra responsabilidad. Bajo esta premisa va a trabajar los próximos años, como vicepresidente, portavoz y consejero de un gobierno de acción que quiere arrancar con medidas de regeneración; la reforma exprés del Estatuto para acabar con los aforamientos, y todo lo que atañe a derechos. Recuerda que el cambio era y es el cambio de políticas, a lo que se va a dedicar estos cuatro años. «Con que pudiéramos ofrecer cuatro, cinco, seis o siete cosas de mejora reales para la vida de los ciudadanos; una administración más transparente; si conseguimos que los ancianos aquí no mueran atados a una silla, me iría a casa muy contento».

Cs, una formación liberal con vocación de centro, se ha convertido en el partido que quiere sustituir en la derecha al PP. ¿Se ha derechizado Ciudadanos?

Lo que se percibe es una estrategia política, no un cambio de programa. Nuestro programa y modelo de sociedad siguen siendo los mismos, que es lo importante en los partidos. De hecho, en Castilla y León sigue incluyendo las mimas medidas: derechos y garantías al final de la vida; protección del colectivo LGTB; medidas de un partido liberal en lo económico, y de un partido progresista en lo social. Es verdad que hay una estrategia. Su debate ha sido largo, intenso y, además, público, pero una cosa es una estrategia política, y otra el modelo social que propone Cs, que no ha cambiado.

¿Cómo un partido liberal como el que se dicen ustedes puede pactar, siquiera por omisión, con Vox? ¿Es difícil de explicar?

Lo que ha pasado en Castilla y León es muy curioso. No nos hemos sentado con Vox, ni hemos llegado a un acuerdo programático, que incluye la defensa de la ley LGTB, la muerte digna, entre otras muchas cosas, y Vox se ha abstenido, cuando en otras comunidades ha dicho que no. Es un poco una niñería. Ha colocado muy por encima la propaganda a lo que les interesa. No hay que llegar a acuerdos con Vox, lo creo yo y lo cree mi Ejecutiva, y Vox tendrá que asumir sus responsabilidades.

¿Temen que esa estrategia les aleje un poco de ese PSOE más moderado?

También es verdad -habiendo sido yo una de las personas que ha debatido sobre la estrategia-, que el Partido Socialista no ha hecho nada de nada. Después de la Ejecutiva, lo siguiente que vi en la televisión fue al señor Zaragoza diciendo que con Rivera no. Dos no bailan, si uno no quiere. Y la estrategia de inmovilismo absoluto y de que me caiga el gobierno pactando y manteniendo sus estrategias con quienes no deberían, no ayuda mucho. Y yo he sido una de las personas que ha debatido sobre este aspecto. Cada día que pasa, también aquí, estoy más conforme con la estrategia.

Desde el 26M, ¿ha estado alguna vez tentado de seguir los pasos de Toni Roldán?

¿Ganas de irte a casa? En este oficio, si te lo tomas en serio, todos los días. Lo que tienes que pensar es si tú puedes cambiar la sociedad desde donde estás o no; puedes aportar algo a la mejoría de los ciudadanos de Castilla y León, o no; es mejor que estés tú o que esté otro. De momento, creo que hay cosas que se pueden hacer; se puede cambiar la sociedad y mejorar la vida de los ciudadanos de Castilla y León. Por eso sigo en política. pero ganas de dejar la política, y dedicarme a la literatura, muchas.

¿Qué ha sido lo más duro estas semanas?

Lo personal. A mi la estrategia y el debate político, no me importa, es el oficio. Pero la descalificación personal sistemática, el insulto… acaba cansando; es duro.

En este ámbito personal, ¿ha tenido que dar en algún momento la vuelta a sus propias convicciones, a su posicionamiento ético?

Cuando tomas una decisión, lo haces pensando qué es lo mejor para los ciudadanos. El mundo del blanco y el negro; del bien y el mal, más allá de Disney es inexistente. Hay que tomar decisiones que a veces son difíciles de comprender para los demás. En ese momento hay que poner la vista más lejos de hoy. En este asunto lo que nos importa es que dentro de cuatro años los votantes piensen qué mereció la pena; si hicimos algo, si cambiamos algo. Mucha gente que espera de nosotros que cambiemos las cosas. Y eso es mucho más importante que me escupan por la calle. A eso hemos venido.

Está instalada la idea de que ha ido al acuerdo con el PP obligado por la dirección de su partido en Madrid y que se resistió, pero perdió el pulso. ¿Qué hay de cierto?

Cs es un partido nacional que mantiene la misma estrategia y el mismo discurso en todos los territorios. Es una de las esencias del partido: la igualdad. Nadie es mejor que nadie, ni un territorio es mejor que otro. Sobre el acuerdo programático, en lo que corresponde a Castilla y León, no ha habido ninguna intervención, ninguna. Es nuestro programa. ¿Había una estrategia marcada a nivel nacional de socio preferente?, sí, ya lo dijimos, y esa estrategia se ha seguido. Aquí han venido tantas veces los miembros de los comités de pactos, como han ido a Murcia, a Madrid o a Asturias.

¿Se sintió obligado, o Igea ha sido libre?

Esto no es obligado. Tú estás en un partido, con un debate estratégico, lo llevas a la Ejecutiva, votas y lo pierdes. Entonces, cumples con lo que toca. Esto no debería de tener nada de extraordinario. Asumo las directrices de mi partido porque pienso que es esencial para el funcionamiento de este país; comparto su modelo de país y sus propuestas programáticas. Pero ya digo: a medida que pasan los días cada vez lo tengo más claro. Sí me he sentido libre, claro, porque libre es el señor que toma decisiones y las asume. Y eso es lo que he hecho, tomar mis decisiones y asumirlas.

Desde el PSCyL se ha sugerido que tenían ya algo hablado y de ahí que se hayan sentido traicionados, ¿se ha faltado a la palabra dada?

Hemos mantenido conversaciones discretas. El señor Tudanca sabía que yo me debía a las directrices de mi partido y cuál era la estrategia. Pero sí, claro, hemos mantenido conversaciones, cuyo contenido conoce el señor Tudanca, que es quien lo tiene que conocer. Yo no he faltado a mi palabra ni al PSOE, ni a los ciudadanos. Durante semanas y semanas de campaña, y después de la campaña se nos ha preguntado una y otra, y otra vez con quién pactaríamos. Le reto a alguien que diga que ese día dije que íbamos a pactar con los socialistas. Si alguien encuentra esta declaración… Yo he hecho lo que dije que iba a hacer.

¿Si alguien hubiera alzado la voz, las cosas hubieran sido diferentes?

Antes de campaña dijimos, yo y mi presidente, si alguien se levanta y se enfrenta a esta estrategia, nosotros le escucharemos. ¿Usted lo ha visto? No, pues yo tampoco.

Centró su campaña en la necesidad de cambio. ¿Es complicado explicar que luego dé el apoyo a un partido que lleva 32 años gobernando en Castilla y León?

Hemos dado soporte a un gobierno conjunto que tiene seis consejerías para el PP y cuatro para Ciudadanos; a un gobierno que tiene un programa que, prácticamente, es el nuestro; que propone medidas en sanidad que no se han propuesto nunca; en políticas sociales, educación, economía, en empleo; que toda la actividad de la Junta sea transparente; que los ciudadanos sepan dónde están sus papeles; cuánto se gastan en cada medio de comunicación de manera accesible; que propone un montón de políticas distintas. Eso es el cambio y eso es lo que dijimos desde el principio. El cambio era y es el cambio de políticas. Lo esencial es el cambio de las políticas públicas, su medición y su transparencia; es el cambio más radical. Y eso es lo que nosotros queremos traer. Por qué, porque eso es la libertad, que la gente vaya tan lejos como su mérito y capacidad, y no como su red clientelar, le lleve. Y eso es lo que vamos a hacer, si no hacemos eso, no habrá habido cambio.

Pero la política, a veces, también es estética

Sí, tiene una parte de estética y de retórica, pero no es solo estética. Lo que yo estoy viendo estos días, a propósito de la estética, es algunas cosas que me sorprenden desagradablemente. Si esta es la manera que tiene el Partido Socialista de enfrentarse a la oposición del gobierno, no sé lo que harían estando en el gobierno. Si estos señores que insultan, ofenden...tuvieran poder... La estética tampoco es su fuerte.

¿Se refiere a la actitud vista estos días por parte de algunos socialistas en la Cortes?

La actitud de Luis Tudanca es razonable dentro de la situación. Me preocupa muchísimo más el entorno que es altamente sorprendente. Yo critiqué la profesionalización de la política, en su día. Pero hay personas que llevan desde los 22 años en política sin haber hecho otra cosa y se permiten el lujo de criticar a otras que llevan desde que tenían 30, pero que antes habían ejercido como abogado dos años. Lo del consejero de la marina lo puedo decir yo, pero no ellos.

¿Esa actitud tan bronca puede condicionar la propia acción del gobierno?

La bronca no nos va a alterar. Nosotros tenemos que ser capaces de separar la bronca de nuestra acción de gobierno. En el Parlamento tenemos que legislar y ofreceremos todas nuestras iniciativas al Partido Socialista. La semana que viene les vamos a llamar para empezar con la reforma del Estatuto, de los aforamientos. Una reforma exprés con las mismas propuestas que hizo el Partido Socialista la pasada legislatura, la eliminación de los aforamientos para miembros de la Junta y parlamentarios. Vamos a mantener la mano tendida siempre; Ahora, ¿vamos a estar acomplejados?, no.

Pero el PSOE plantea una reforma en profundidad, con más materias ¿están dispuestos a abrir una reforma profunda o, de momento, se van a ceñir a los aforamientos?

Vamos a hacer una propuesta de reforma exprés y urgente para acabar con los aforamientos, y luego abriremos la reforma hasta donde veamos que es posible, y hablaremos con el Partido Socialista y con el Partido Popular. Tenemos un compromiso programático con nuestros militantes, y otro compromiso programático con el PP, que coincide con lo dicho con el Partido Socialista. Si la posición del PSOE vuelve a ser 'dame todo lo que yo quiero o no te doy nada', semejante grado de infantilismo los ciudadanos se lo harán pagar.

¿La reforma se abrirá a más campos?

En el futuro, se abrirá a más campos. La política del todo o nada; la sociedad blanca o negra, es una política de populismo, del pasado y condenada al fracaso. La política es ir mejorando poco a poco las cosas que podemos mejorar. ¿Por qué no vamos a mejorar poco a poco? Si el PSOE se entrega a la estrategia de Podemos, el blanco y negro; el bien y el mal... Los más probable es que se le acabe viendo como un partido inútil, y si hay algo que castigan los ciudadanos son los partidos inútiles. En mi partido hemos tenido muchos debates, algunos de los que yo he perdido, pero una cosa está clara, que cuando un partido es útil te votan y si eres un partido inútil no te votan. Y eso le pasa a Podemos y parece, por las encuestas, que le está pasando a Vox.

¿Esas serán sus primeras iniciativas?

Vamos a empezar con la parte de regeneración a la mayor velocidad posible, porque es legislativo, y con normas que ya tenemos prácticamente desarrolladas, como fue la Ley de garantías al final de la vida que se propuso en el Congreso de los Diputados, que está redactada. Lo primero va a ser todo lo que atañe a los derechos, que sea fácil de resolver con una norma. Luego hay cosas que nos van a llevar más tiempo como temas estructurales y de evaluación.

Habló de que lo suyo con el PP no es un matrimonio de por amor, sino por responsabilidad, ¿cuando hay grandes intereses se soportan mejor las parejas?

A veces funcionan mejor, sí. Es evidente que nosotros no somos del Partido Popular y que tenemos y creemos en un modelo de sociedad y de país diferente. Hemos criticado mucho al PP, y también al Partido Socialista. La política es responsabilidad. Hace cuatro años, cuando estábamos apunto de ir a las terceras, no dije cosas muy diferentes de las que digo ahora sobre la responsabilidad de quienes bloquean la legislatura por sus filias o fobias. Y sigo pensando lo mismo. No puede ser que cada vez que uno se plantea un acuerdo de gobierno, la traición, la ofensa... Esto es un acuerdo, esto pasa todos los días en Europa y no pasa nada.

Desde la Vicepresidencia que asume, ¿qué capacidad o qué mecanismos han pensado para poder hacer una coordinación efectiva del Gobierno en su conjunto?

Hay un sistema de funcionamiento pactado para llevar las cosas a las reuniones, y un mecanismo también de control parlamentario. Y luego hay una parte que va a depender también de la Consejería de Transparencia y Gobierno Abierto, que va a tener el control de la actividad del resto. Además tenemos la portavocía, que te permite comunicar la acción de gobierno, y la política de comunicación, que para nosotros es importante. Hemos llegado a un buen acuerdo para ambos que va a funcionar, nuestros empeño es que funcione.

En qué consiste exactamente ese mecanismo

Es una comisión paritaria con portavoces parlamentarios del partido, de modo que las cosas que vayan a la comisión de secretarios no van a pasar si no hay acuerdo. Va a ocurrir lo mismo con los asuntos parlamentarios y de gobierno, de otra manera. El mecanismo consiste en cierto grado de consenso y de unanimidad. Tiene que echar a andar; es la primera vez que esto se hace aquí en muchos años y tendremos nuestros más y nuestros menos.

¿Qué tipo de portavoz del Gobierno será? ¿Podremos esperar de usted siempre la verdad aunque sea contraria a sus intereses?

Tendré que comunicar y defender la acción del gobierno que es lo que hace un portavoz. Si hay algo que hemos sido durante toda la campaña es abiertos a la prensa, y vamos a seguir siendo así. Un gobierno tiene que ser transparente, abierto a la prensa y a todas las opciones posibles, por eso nos disgustó lo que ocurrió el otro día, durante la presentación del acuerdo para el gobierno. Trataremos de comunicar lo más fiel posible la acción de gobierno. Siempre he creído que eso de que la verdad os hará libres es una gran verdad; pero cómo se cuentan las cosas también es importante.

Comentaba que la nueva Consejería de Transparencia tendrá entre sus cometidos el control del resto. Cómo va a funcionar

Su principal misión, entre otras, es la lucha contra la corrupción; la agilización de los procesos, y la mejora de la administración para el ciudadano. Lo que queremos es que cada señor que meta un papel en la administración pidiendo una subvención o una ayuda sepa dónde está en cada momento. Eso es transversal para todo el gobierno, y nos va a permitir que la gente sepa que se le trata con igualdad, y conocer dónde están los cuellos de botella, para saber dónde actuar. Es el planteamiento de una administración más ágil e independiente. Se trata de medir y medir y transparentar los pasos. Otros son legislar para mejorar las condiciones de gobierno abierto y de lucha contra la corrupción

Uno de los planteamientos que se hace es la desaparición de lo que llaman Administración paralela. Pero ahí hay cosas muy dispares

Ese es el reto. No quiere decir ni que funcionen todas mal, ni que no sean públicas. Lo público es lo que se paga con impuestos, y nosotros lo que tenemos que hacer es evaluar qué parte de estas cosas funcionan como servicio público eficaz, y qué parte de esas cosas sirven para, eludiendo el derecho administrativo, contratar y privilegiar. Hay cosas que se pueden quitar, ya lo hemos dicho, como la Fundación Villalar, que puede ser asumida por la Consejería de Cultura. Hay cosas que pueden tener más dificultad, como contratar una orquesta, y son cosas que hay que analizar. Pero otras, como Somacyl, tienen bastante pinta de que van a cambiar. Tenemos que estudiarlo, pero la intención es restringirlo al máximo y que se quede lo que es eficaz.

El 15 de octubre tiene que haber Presupuestos de la Comunidad en las Cortes, ¿podrán aprobar las cuentas en plazo?

Lo será para este primer año, hasta que tengamos presupuestos, pero déjenme que tengamos consejero.

Habla de consejeros. Ya se ha especulado sobre algunos nombres, como Verónica Casado para Sanidad y Germán Barrios para Empleo. De la primera dijo que era una magnífica candidata, ¿del segundo?

Un magnífico candidato. La gente nos ha mandado muy buenas vibraciones y es una persona que ha estado ocho años en el CES. Es una persona de consenso y de unanimidad. Sería un excelente consejero.

Despoblación. ¿No es un poco decepcionante que después de 18 años de consejos, estrategias, comisiones, agendas, comisionados, lo que se ponga encima de la mesa sea un grupo de expertos?

No es solo eso. Son bajadas de impuestos en los pueblos de menos de 5000 habitantes; tarifas planas de autónomos; supresión del Impuesto de Sucesiones para empresas y producciones agrícolas, consultas de alta resolución para los habitantes de los pueblos que disten más de 50 kilómetros de un hospital; educación infantil; explotación del patrimonio… Hay unas cuantas medidas. En ese grupo se abre la posibilidad de que todos los grupos parlamentarios colaboren; no es el programa de lucha contra la despoblación

En la anterior legislatura, el PSOE se negó a participar en la comisión sobre la despoblación

No puedo trabajar por el Partido Socialista. Si decide volver a ponerse en la tumbona, como lleva 32 años esperando a ver si le cae el gobierno… Si su trabajo es ponerse en la tumbona y twittear, me parece bien, pero tener 3.000 retweet es poco probable que acabe con la despoblación.

Asegura que los problemas de la sanidad derivan de una mala organización, y desde la Junta estos años se sostenía que es un problema de recursos y de falta de especialistas. ¿Están garantizados los recursos?

Hay que estudiar cómo se incentivan las zonas de difícil cobertura; con puntuación, salario, antigüedad… con la posibilidad de una vivienda. Podemos intentar hacer muchas cosas, pero tenemos un problema de escasez de médicos que es una realidad y que además va a más. Tenemos que intentar que esto sea atractivo mejorando las condiciones de trabajo, acabando con la interinidad, las bolsas de temporalidad, integrando a los médicos de área… Tenemos un problema de dotación presupuestaria que no nos permite realizar grandes esfuerzos más allá de lo que se está haciendo del reconocimiento de carrera. Para mejorar las condiciones salariales tenemos que buscar un método de incentivación y de mejora de la gestión, un esquema de trabajo que hagan los puestos más atractivos, con empleo estable.

Pongas lo que pongas, la sanidad se lo come todo el presupuesto

Sí, se come lo que le pongan. En sanidad, a la gestión le come la urgencia. Te pasas el día apagando fuegos. Una cosa que tenemos claro es que tienes que tener a los bomberos apagando fuegos, tienes que tener también a alguien limpiando y pensando en plantar para que dentro de cuatro años no haya fuegos. La sanidad va a seguir siendo la parte más importante del presupuesto, porque es el servicio público más que más consume, pero vamos a intentar mejorar la gestión y la eficiencia para que dentro de cuatro años, cinco años, hayamos producido mejoras del cinco, diez, quince por ciento de rendimiento que suponen muchos millones de euros que se pueden dedicar a incentivar y a hacer atractivos los puestos.

Habla de dotaciones, qué política de centros se va a desarrollar, y en qué lugar quedan los consultorios?

Lo dije y lo sigo manteniendo, los consultorios no prestan servicios sanitarios: son edificios. Nos pasamos la vida pensando que los ladrillos hacen cosas y los que hacen las cosas son los médicos y los enfermeros. Puede ser un incordio desplazarse a otro sitio para recibir asistencia, pero también es recomendable para algunas técnicas especializadas. No queremos decir que no se pueden hacer cosas en hospitales más pequeños, pero de lo que tienes que estar seguro es de la calidad que se presta. Vamos a dar una vuelta seria al mapa de centros y nos vamos a centrar no solo en el número de población o el kilometraje, sino en la accesibilidad. Hay que pensar que si necesitas taxistas, conductores, o conductores médicos y que, si lo que tenemos es un problema de movilidad, lo que tenemos que hacer es solucionarlo de la manera más eficiente posible. De lo que se trata es de dar soluciones a la gente, y no falsas promesas, y una ventaja competitiva, de modo que, por ejemplo, la gente de Barruelo, sepa que cuando vaya al hospital de Palencia le harán todas las pruebas en un día. Hay que darles soluciones reales y posibles y ventajas competitivas.

Ordenación del territorio, otro tema en el que se llevan años moviendo papeles. ¿Se aprovechará el trabajo hecho; qué idea tiene?

Seríamos tontos si no lo aprovecháramos. El territorio tiene que ordenarse para que los servicios se presten con eficiencia. Siempre hemos hablado del mismo asunto, de la agrupación de municipios. Decían que iba a ser un drama, que íbamos a ir a los pueblos con una retroexcavadora y cal viva para que no fuera a vivir nadie más. Otros lo llamaban ordenación del territorio. Ahora como estamos en un gobierno conjunto, vamos a llegar a un nombre de consenso que nos permita hacer eso que todos los partidos pretenden, que es organizarlo para que se puedan prestar los servicios de una manera racional y eficiente. El mapa rural que hay está hecho en función de las zonas básicas de salud, que es lo que nosotros pensamos, porque es el servicio público esencial y no tiene mucho sentido agrupar por un lado zonas de salud y por otro lo servicios.

¿La reversión a lo público del Hospital de Burgos será un buen ejemplo para medir el cumplimiento de las expectativas en materia sanitaria?

La reversión es realmente viable. De la comisión de las Cortes salieron unas cuantas conclusiones par ver si había habido malas prácticas o no. Dimos nuestra opinión y lo hemos llevado a la Fiscalía. Si hemos dicho que hay un sobrecoste, sería complicado que ahora dijéramos que vamos a volver apagar. ¿Cuál es el problema? Si la concesionaria es capaz o no de manera eficiente de proporcionar los servicios que tiene que prestar con el contrato que tiene. Si no lo es, estamos dispuestos a estudiar una salida. La concesionaria tienen que dar servicio. Si no va a dar servicio nosotros vamos a ser inflexibles

Asumen ustedes la responsabilidad del Diálogo Social, una seña de identidad de la política de Castilla y León que su partido ha mirado en ocasiones con recelo. ¿Cambiará algo; introducirán más actores?

Esperamos que mejore y sea más participativo y más abierto, pero sobre todo esperamos que sirva para el crecimiento. La paz social es necesaria, el diálogo es necesario, pero no es el objetivo. Es una herramienta. Nosotros vamos a escuchar a los autónomos, y si la ley lo permite bien, si no, habrá que cambiarla. Nuestro objetivo, insisto, no es acabar con el diálogo social, ni mucho menos; ni creo que la persona que suena para esta Consejería sea la que simboliza la lucha contra el Diálogo Social, más bien, todo lo contrario.

¿En qué se verá el cambio con la Consejería de Cultura y Turismo?

Hay que hacer unos cuantos cambios en la política cultural y de patrimonio y de turismo, como desestacionalizar el turismo y fomentar más el uso del patrimonio para evitar que luego haya que rescatarlo. Hay que hacer de la cultura algo mucho más transversal y mucho menos dedicado, que no está mal, al evento. La cultura no puede basarse solo en dos o tres eventos.También, hay eventos que hay que gestionar como se merecen, como el 500 aniversario de la batalla de Villalar y habrá que celebrar el centenario del nacimiento de Delibes.

Dentro de cuatro años, ¿cómo sabrán los ciudadanos si ha cumplido sus expectativas en este gobierno de coalición?

Mirando el programa y mirando la realidad. Es lo que va a decir si hemos servido para algo o no. Con que pudiéramos ofrecer cuatro, cinco, seis o siete cosas de mejora reales para la vida de los ciudadanos, una administración más transparente; si conseguimos que los ancianos aquí no mueran atados a una silla, pues a mí me daría igual lo que vote la gente, me iría a casa muy contento.

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