El 50% de las familias atendidas por Cruz Roja tiene que elegir entre pagar gastos básicos o calentar sus hogares
Solo en la provincia de León la organización ha formado a 268 familias en conceptos básicos sobre la factura, el bono social y han recibido consejos para ahorras en los domicilios | La pandemia ha incrementado en un 15% las intervenciones frente a la pobreza energética
La pobreza energética relacionada con la capacidad de los hogares de mantener una temperatura adecuada en los hogares vuelve a crecer en España y afecta al 9,1% de la población, un uno por ciento más que el año anterior. Esta situación impacta especialmente sobre las personas vulnerables con las que trabaja Cruz Roja. El 50 por ciento de las familias atendidas tiene que elegir entre pagar gastos básicos, cómo llevar una alimentación adecuada o calentar sus hogares.
Solo en 2020 Cruz Roja ha realizado más de 14.000 intervenciones a personas afectadas por la pobreza energética, 268 familias en la provincia de León. Dado el grave impacto económico de la pandemia, la organización tiene previsto atender durante este año a más de 17.000 personas, lo que supone un incremento del 15% sobre sus previsiones al inicio del año.
Para apoyar a las personas afectadas por la pobreza energética, Cruz Roja desarrolla diferentes acciones que van desde la atención a necesidades urgentes, las ayudas para el pago de recibos, la entrega de kits de eficiencia energética hasta la participación en talleres de ahorro doméstico.
Para incrementar la intervención en el actual contexto de la pandemia, Cruz Roja ha tenido que adaptar sus metodologías para poder seguir atendiendo a las familias más vulnerables. «No podemos entrar en los domicilios, ni hacer formaciones en grupo y por ello se está potenciando las llamadas telefónicas individuales y los webinars grupales para ofrecer consejos de buenas prácticas de ahorro energético, asesoramiento con las facturas y detectar a través de estas llamadas cualquier necesidad adicional de intervención en los hogares como obras ante humedades, problemas de temperatura y confort en la vivienda, cuestiones de riesgo eléctrico o sustitución de calderas», indica Sara Casas, responsable de la organización.
En Castilla y León este proyecto cuenta con la subvención de la Junta de Castilla y León a través de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y que está financiado con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para la realización de programas de interés general.