El comercio leonés, sobre el 'Black Friday': «Es una mala importación: o te sumas o te arrastra»

Las tiendas de León empiezan a ver sus escaparates salpicados de los carteles negros que anuncian unas rebajas con sabor americano.

El Black Friday ya se deja sentir en muchos negocios de la capital en una promoción que no acaba de convencer al pequeño comercio.

Javier Menéndez, de la Asociación Leonesa del Comercio, cree que este 'viernes negro' es una «mala importación» que ha hecho el sector. «Se creó para convertir los números rojos del mercado americano en negros en una fin de semana de locura», explica, pero, sin embargo, en España «lo importamos casi todo mal» y ahora ya se habla de «black month» y ha pasado de un viernes a una semana, a un mes, o a todo el fin de semana.

El presidente de Aleco cree que estas rebajas son pan para hoy y hambre para mañana ya que repercuten en el gasto del cliente, que centra sus compras en estos días de ofertas. «Muchos regalos navideños se generan en estos días y luego llega la sequía al comercio, antes y después. Creo que para el comercio nacional no es una buena noticia». Sin embargo, a los comerciantes no les queda otra que seguir esta corriente que, afirman: «te sumas o te arrastra completamente».

Las ofertas no se pueden retirar en un contexto donde «hay un monstruo en la web que no nos permite quedarnos mirando» y los pequeños negocios deben entrar a la lucha por la competencia. Aleco hace aquí un llamamiento a consumir comercio tradicional «porque un euro del comercio tradicional genera trabajos, impuestos y bienestar», mientras que en la web «esos impuestos nunca llegan a nosotros. Hay quien con 1.300 millones de ventas en web ha pagado 88.000 euros de impuestos».

Por ello, todos están preparados para este viernes negro que, en un año tan singular como este 2020 no saben cómo se desarrollará.

Los asociados ven a la gente reticente a salir y más cuando «otras veces, el motivo de salir es tomarse un café que ahora no pueden». «Este año va a ser todo diferente. ¿Va a haber Navidad? ¿Vamos a poder comernos el turrón con nuestros hijos? No lo sabemos. Aunque se trata de paliar las cifras, las dudas existen», asegura Menéndez.

La repercusión del Black Friday otros años permite al comercio leonés incrementar sus ventas en esa semana un 30% con respecto a otros meses.

En esta ocasión, la pandemia se colará también en sus tiendas y el miedo a los contagios hacen de este viernes negro un día de dudas del que esperan ayude a aclarar un año muy oscuro.