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Jon Rahm durante la ronda final Reuters
Jon Rahm cumple el sueño de la Ryder Cup ante el renacido Tiger Woods
Golf

Jon Rahm cumple el sueño de la Ryder Cup ante el renacido Tiger Woods

El «Tigre» ruge de nuevo tras ganar el Tour Championship y acabar con cinco años de sequía

Pablo San Román

Saint-Quentin-en-Yvelines

Lunes, 24 de septiembre 2018, 17:47

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Jon Rahm cumplirá un sueño al ser seleccionado por primera vez para jugar la Ryder Cup. La competición y Severiano Ballesteros tuvieron mucho que ver en que se dedicara a este deporte, donde es ahora octavo en el ranking mundial. En 1997, cuando Jon Rahm no había cumplido los tres años, sus padres, Edorta y Angela, asistieron a la Ryder Cup que se disputó en Sotogrande, en España. El capitán era Severiano Ballesteros y Europa ganó aquel torneo.

El padre de Jon, gran deportista, comenzó a jugar al golf y transmitió esa inesperada pasión a su hijo. Más de 20 años después de aquello, Rahm, que fue mejor jugador del mundo amateur, afirma ser un «enfermo» del golf y gran seguidor de Severiano Ballesteros. Su novia estadounidense, Kelley Cahill, una antigua lanzadora de jabalina que estudia en la Universidad de Arizona, como él, lo sabe. «Odia que le hable mucho sobre golf», afirmó en una ocasión el golfista nacido en Barrika, cerca de Bilbao.

«Significa mucho para mí estar en el equipo europeo. Ante todo soy europeo. Siempre quise jugar la Ryder Cup y siempre quise formar parte del equipo europeo»

JON RAHM

Rahm vive en Phoenix (Arizona), donde se graduó en comunicación en 2016. Cuando fue elegido para formar el equipo europeo que se enfrentará a Estados Unidos en Saint Quentin en Yvelines, en las afueras de París, un sueño de niño se hizo realidad. Será el undécimo español en disputar el torneo, y en esta ocasión estará junto a Sergio García, que ya ha disputado ocho y ganado cinco. «Significa mucho para mí estar en el equipo europeo. Ante todo soy europeo», afirmó al ser seleccionado, cuando algunos pensaban que podía jugar para Estados Unidos, después de varios años viviendo en el país norteamericano. «Siempre quise jugar la Ryder Cup y siempre quise formar parte del equipo europeo», añadió en aquella ocasión. Severiano Ballesteros tuvo mucho que ver en su apego al golf. «Fue una gran influencia. De una manera indirecta tengo que darle las gracias. Si mi padre, tras seguirlo e 1997, no hubiera jugado al golf, yo no estaría aquí», señaló.

Pasión por el Athletic

Fuera del golf, su otra gran pasión es el Athletic Bilbao, su equipo de fútbol favorito, algo que también ha heredado de su familia. Su abuelo, Sabin Rahm, que falleció hace pocas semanas, fue durante muchos años delegado de los equipos inferiores del Athletic. Su abuelo acompañó cuando eran niños y adolescentes a muchas de las figuras que pasaron por el primer equipo. Ernesto Valverde, actual entrenador del Barcelona, comenzó en los noventa siendo entrenador del equipo cadete del Athletic, y a su lado estaba Sabin Rahm.

Esa pasión del golfista se refleja en un bien visible escudo del Athletic en la bolsa y en la agenda que pasea por todos los campos del mundo. El golf y el Athletic son sus dos grandes pasiones y un triunfo del club rojiblanco le alegra casi tanto como uno propio.

Pero además del Athletic y el golf, Jon Rahm deberá pensar tras la Ryder Cup en su boda con su novia Kelley Cahill, con la que se comprometió en las últimas semanas. «Hasta que no pase todo esto no pensaremos en ello», dijo en referencia a la Ryder Cup. Además de la fecha, Jon Rahm debe elegir el lugar ya que su familia vive en el País Vasco y la de su novia en Oregon, en Estados Unidos. Un buen regalo de boda para ambos sería un título de la Ryder Cup.

Un tigre de vuelta

Enfrente tendrá a un mito que está de vuelta. Tiger Woods ha vivido cuatro cirugías en su espalda por sus dolores de espalda y, al final, fue sometido a una fusión espinal que apenas le permitían caminar hace unos meses pero este fin de semana ganó el Tour Championship y puso fin a una sequía de títulos que duraba cinco años. «Lo peor fue no saber si iba a poder vivir sin dolor. Me preguntaba si un día podría sentarme, levantarme o estirarme sin sentir dolor. No quería vivir así. Jugar al golf me parecía imposible, no podía sentarme ni andar ni estirarme sin tener dolor en la espalda y mi pierna durante un largo periodo de tiempo», explicó tras su éxito», explicó visiblemente emocionado el golfista estadounidense.

En un East Lake Golf Club lleno a rebosar, Tiger encaró el último hoyo con una amplia sonrisa en su cara, sabiendo que tenía el título en sus manos. «Lo pasé mal conteniendo las lágrimas en el último hoyo. No dejaba de decirme: 'Eh, aún puedes tirarla fuera. Pero una vez metí la bola en el green, choqué la mano de Joey (LaCava, su caddie) porque sabía que lo había conseguido», añadió.

Bjorn, feliz con actuación de Sergio García en Portugal

El capitán del equipo europeo de la Ryder Cup, el danés Thomas Bjorn, se mostró feliz este lunes en rueda de prensa por el buen torneo que realizó el español Sergio García en el Masters de Portugal de golf. Sergio García, con una buena actuación en el primero y cuarto recorridos, terminó en séptima posición en Portugal, su primer Top 10 desde julio de este año, cuando fue octavo en el Open de Francia. «Estoy contento. Y lo estoy por Sergio. Creo que quería tener una buena actuación, para sentirse bien. Sé de lo que es capaz Sergio y lo que trae al equipo. Es parte integral de lo que somos y de quiénes somos», dijo el danés.

Sergio García, 28º jugador del mundo en este momento, fue uno de los cuatro jugadores elegidos por Bjorn para completar la docena europea en la Ryder Cup, que se disputa de viernes a domingo en Saint Quentin en Yvelines, en la periferia de París. «Estará feliz con lo que ha hecho esta semana. Vino con ganas tras su buena actuación en Portugal y una gran sonrisa en su cara y eso es lo que transmitirá a sus compañeros», explicó el capitán europeo.

Bjorn ha tratado de motivar en las últimas semanas a Sergio García, sabedor de que su experiencia es una baza importante para el equipo. «Sergio es el tipo de chico que a veces necesita ese pequeño empujón. Creo que las conversaciones que he tenido con él que llevaron a que lo eligiera y que tuve después de eso, hacen que sienta que está en el lugar adecuado y que su golf está yendo en la buena dirección. Sé sus virtudes como persona y ahora quiere jugar y mostrar de lo que es capaz», explicó Bjorn.

El danés tiene plena confianza en el golfista castellonense de 38 años. «Sabemos que Sergio en su mejor forma es uno de los mejores golfistas del mundo. Está en un buen momento. Tiene una gran sonrisa en su cara, está feliz y deseando jugar. Como todo el equipo está motivado por esta Ryder Cup. No es más que cualquiera de nuestros otros once jugadores, pero sí es una parte importante de lo que somos, igual que el resto. Estoy encantado con las conversaciones que he tenido con él. Han sido positivas y muy buenas. Sabe lo que está haciendo y que está en un buen momento», concluyó el danés.

Los miles de seguidores que lo acompañaron en el campo de Atlanta celebraron el regreso de su ídolo a lo más alto. Él que se encontraba postrado en una cama hace apenas un año, este domingo era vitoreado y rodeado por los enfervorecidos fans que disfrutaban con ver su retorno a la cima. «El mero hecho de jugar y volver a ser competitivo era ya un éxito. Los que son cercanos a mí y algunos jugadores saben lo que he recorrido, lo difícil que ha sido para mí simplemente volver a jugar (...) Disfruto plenamente de ser capaz de hacer todo esto de nuevo, no sabía si podía volver a jugar al golf un día», añadió.

Su último éxito databa de agosto de 2013, cuando se consagró en el Bridgestone Invitational. Entonces nadie pensaba que tardaría 1876 días en volver a levantar un trofeo pero, tras dominar desde la primera jornada, volvió a coronarse en el Tour Championship. Por tercera vez en su carrera. El estadounidense, de 42 años, sumó así el 80º título de la PGA de su carrera, y se quedó a solo dos del récord absoluto de su compatriota Sam Snead.

«Ochenta es una cifra enorme. Hacía cinco años que estaba bloqueado en 79. Lograr llegar a 80 es una sensación increíble. Sam (Snead) todavía está por delante (pero) creo que aún tengo tiempo por delante para intentar sobrepasarle», sentenció el ganador de 14 trofeos de Grand Slam.

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