El Mundial de 2018, Escobar y Lukaku

Hace casi cuatro años, Fidel Escobar vivió una experiencia única en su vida: debutar en un Mundial absoluto, el primero que disputaba su selección nacional, Panamá.

El ahora jugador de la Cultural, con 23 años, era titular fijo en aquel combinado panameño como central y disputó todos los minutos de los tres partidos de la fase de grupos de aquella Copa del Mundo en la que Panamá quedó encuadrada con Bélgica, Inglaterra y Túnez.

El primer partido fue ante Bélgica, a la postre semifinalista del torneo. Y Escobar se encargó de cubrir a una de las estrellas belgas, Romelu Lukaku, con el que compartió buena parte de aquel encuentro.

Por ello, el 'Comandante' le pidió la camiseta al delantero belga y se encontró con una agradable sorpresa. «Fui junto a Lukaku y le pedí la camiseta en inglés. Hay algunos jugadores de ese nivel que te dicen que no o ni te hacen caso. Pero él me respondió en español y me dijo que sí, que al final del partido cambiábamos la camiseta», explica Escobar.

Sorprendido por la «humildad» de Lukaku, su sorpresa aumentó al finalizar el partido, cuando el belga le esperó en el túnel de vestuario. «Hubo otros compañeros que se la pidieron y se lo negó porque ya lo había hablado conmigo. Hay jugadores que te la dan y no te piden la tuya, les da igual. Él sí me la pidió y se la puso, además de firmarme su camiseta», destaca.

Ahora, ese imborrable recuerdo está enmarcado en su casa, señala Fidel Escobar y, cada vez que lo ve, siente una «enorme satisfacción».

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