Manolo Cadenas, durante la entrevista con leonoticias.

Manolo Cadenas, el 'león' que quiere ser 'gladiador'

Manolo Cadenas asume con ilusión y el reto de disputar los Juegos Olímpicos de Tokio su nueva etapa al frente de la selección argentina | Considera que ha vuelto el Ademar «que todos queremos ver» y que no esperaba que Juanín «llegase a ser tan bueno»

dani gonzález

Miércoles, 10 de mayo 2017, 18:44

El Coliseo de Roma fue escenario en multitud de ocasiones de la lucha entre el humano y la fiera, entre gladiadores y leones. Pero los tiempos han cambiado, esos espectáculos han pasado a mejor vida y ahora se estudian en el entorno de la historia. Tanto han cambiado que ahora hay un león, Manolo Cadenas, que quiere ser 'gladiador'.

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El entrenador leonés, casi un año después de dejar el puesto de entrenador del Wisla Plock polaco, volverá a los banquillos. Será como seleccionador de Argentina, de los 'Gladiadores', un apelativa que ya casa con el carácter de Cadenas. «El balonmano es un deporte de luchadores, intenso, de máximo esfuerzo físico y mental. Ese nombre me encanta y espero poder ser un gladiador más», afirma.

Desde junio sin sentir el balonmano desde dentro, las ganas de regresar de Cadenas han sido «enormes». Espera «lo mejor» de esta nueva etapa en la que tendrá que encargarse también de la formación de jugadores y este año 'sabático' le ha venido bien para «reciclarme y ponerme al día en este asunto».

Más ofertas, ninguna de su gusto

Las negociaciones con la Federación Argentina fueron rápidas y el acuerdo, casi inmediato. «Ya había vínculos, estuve allí cuando Jordi Ribera fue seleccionador y entablé relaciones. Está pendiente el tema del contrato, pero en la idea deportiva casamos rápidamente», explica.

Reconoce que tuvo más ofertas que la de la selección argentina. Entre ellas está la del combinado nacional de Bahréin, la de un club de Rumanía y otro de Catar. «Ninguna era deportivamente atractiva. No quiero ir a un lugar donde no pudiera competir al más alto nivel», afirma.

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Por ello esperó hasta que llegó la llamada de Argentina. «Esta oferta me llenaba. Preferí esperar en su día y ha valido la pena», sostiene un Manolo Cadenas que hasta finales de mayo no viajará al país sudamericano y que tendrá tiempo para preparar el primer compromiso oficial, ya en 2018.

Con la mirada en Tokio

El objetivo es claro para el leonés: «llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio». En lo personal, tratará de adaptarse pronto al balonmano sudamericano, «es muy diferente al europeo» y «competir al máximo cada partido». «Como entrenador, trataré de mantener en primer lugar lo que hay, merece la pena. Es un gran conjunto a nivel colectivo, pero mi reto es hacer que Argentina sea igual de competitiva o algo más», afirma.

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No será un seleccionador al uso. O eso espera Manolo Cadenas, que tiene la intención de que su labor sea «más amplia que entrenar a la selección» y pueda trabajar también con los jóvenes. «Faltan cosas por concretar, no he viajado a Argentina para hacer un plan conjuntamente con la Federación, pero mi idea es que mi influencia vaya más allá del primer equipo, por decirlo así», afirma.

Esto es algo que no pudo hacer en su etapa como seleccionador de España, «donde apenas he estado con concentraciones y competiciones» y cree que con los sudamericanos «tendré más posibilidades de influir en el equipo y de aportar que con la forma tan limitada de la selección española».

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El 'puente' Argentina-Liga Asobal

Y es que el leonés destaca el alto nivel de los entrenadores argentinos «que con menos recursos han hecho mucho por aprender y mejorar, estando ahora compitiendo al máximo nivel». «Pensar en meterse más arriba es complicado, está Brasil por delante y la evolución pasa por buscar jugadores más altos, con más talento que puedan desarrollarse en las grandes ligas europeas y dar un salto cualitativo al equipo», explica.

Este es el rol que cumple ahora mismo la Liga Asobal con el balonmano argentino, donde hay unos 15 jugadores jugando. «Nos unen muchas características y es importante que la Asobal mejore su nivel para que estos jugadores crezcan más rápidamente», asegura Cadenas, que destaca el papel importante de los tres jugadores del Abanca Ademar, Gonzalo Carou, Sebas Simonet y Fede Vieyra, en los 'Gladiadores', ya que tienen «cualidades difíciles de encontrar aquí».

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Una temporada brillante para el Ademar

Ademarista de pro, Manolo Cadenas también tiene tiempo para repasar la «brillante» del Abanca Ademar. «Es difícil alcanzar este nivel tan alto durante tanto tiempo, la segunda plaza es un premio fenomenal», señala el entrenador leonés que considera que «ha vuelto el Ademar que todos queremos ver y que genera esperanzas de seguir creciendo».

«Hubo un impas por la debacle económica en la que los entrenadores vivimos una situación difícil. Ahora, con Guijosa, es otra etapa donde jugadores, entrenadores, club y afición están yendo hacia arriba. Es una señal de que esto puede ir a más y espero que así sea», explica Cadenas que ve en la posible clasificación para la Champions otra muestra más de la evolución del equipo.

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«Es la competición más grande que hay, cada semana veo ocho o diez partidos de esta competición, es la referencia del balonmano y León siempre ha sido parte importante, con aspiraciones pero sin el presupuesto de los grandes», comenta.

Guijosa y Juanín, entre recuerdos y loas

El Abanca Ademar sigue siendo un equipo de carácter, también en parte por lo que transmite su entrenador, Rafa Guijosa, «que es todavía más intenso que yo». Manolo Cadenas recuerda que como jugador, Guijosa y Svensson «me llamaban la atención por su espíritu de lucha». «Es un ejemplo, eso se transmite y si yo aprendí de ellos esa intensidad... imagínate los jugadores. Es un arma que los jugadores tienen que utilizar», añade.

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El que no le deja de sorprender es Juanín García, al que vio 'nacer' deportivamente. «Nunca esperaba que fuera tan bueno, ni que metiera tantos goles, ni que llegase a jugar a esta edad. Es increíble, es una fuente inagotable y cuando vi que marcaba el gol 2.500 goles me sentí muy orgulloso de aquel trabajo en sus inicios, de su debut ante Portland con tres goles. Ha roto todas las previsiones», asegura.

Ahora comienza una nueva etapa para Manolo Cadenas. Un león repleto de carácter, coraje y garra llega para encumbrar a los 'Gladiadores'. Y no descarta prepararles en su tierra, en León: «estaría encantado, que más podría pedir». Con el sueño de los Juegos Olímpicos de Tokio y de que Argentina siga escalando posiciones en el balonmano mundial, Cadenas llega al país sudamericano. Pero eso sí, sin perder de vista al Ademar de su corazón.

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