Decretan libertad con cargos y una orden de alejamiento para un sacerdote y su hermano acusados de abusos sexuales

El Juzgado de Instrucción nº1 de Astorga ha dejado en libertad con cargos para los dos hermanos vecinos de Carrizo, uno de ellos sacerdote, acusados de un delito continuado de abusos sexuales a una persona discapacitada.

Como medida cautelar, la juez ha decretado una orden de alejamiento con la prohibición de acercarse a menos de 350 metros y de comunicarse por cualquier medio con la presunta víctima además de comparecer el primer día de cada mes en sede judicial, según han confirmado a leonoticias fuentes del caso.

Los dos varones septuagenarios fueron detenidos por la Guardia Civilen la mañana de este miércoles en el marco de una investigación abierta por la Policía Judicial tras la denuncia presentada por la familia de la persona con discapacidad y de unos 20 años de edad. Posteriormente, fueron trasladados a las dependencias de judiciales de Astorga.

Allí y asistidos por un letrado de oficio, los detenidos prestaron declaración ante la juez que, tras la celebración de una vistilla en la que estuvieron presentes los denunciantes, acordó su puesta en libertad y decretó la orden de alejamiento.

Los acusados, que se mostraron sorprendidos por la detención y la denuncia, defendieron durante la toma de declaración su inocencia. Es más, apuntaron a la existencia de al menos un testigo que pudiera corroborar su versión y negar el delito del que se le acusa.

Los progenitores interpusieron la denuncia tras tener constancia de los presuntos abusos a través de un familiar al que el joven, vecino de Villanueva de Carrizo, relató los hechos.

Previsiblemente, en los próximos días la juez abra una ronda de testificales para intentar esclarecer los hechos en la paralelo a la investigación que se mantiene abierta.

Una detención que ha sorprendido a los vecinos de Carrizo, que desconocían los hechos de los que tuvieron conocimiento a través de los medios de comunicación.

En la misma situación se encontraba el alcalde Julio Seoánez, que se encontraba fuera de la localidad, y que se mostraba incrédulo ante las informaciones que han trascendido.

Durante la jornada de este miércoles sorprendió la presencia de efectivos de la Policía Judicial en Carrizo. Ahora ya nos lo explicamos todos», aseguraba Seoánez en una conversación con leonoticias.

Por sorpresa también les ha pillado a las trabajadoras del estanco situado en los bajos del inmueble en el que residen ambos hermanos –calle del Puente del Hierro-, que aseguraban no tener «ni idea de que los detenidos vivieran en ese edificio ni de la investigación que se está llevando a cabo».

Hasta la fecha no ha trascendido más información del caso y se desconoce la relación que unía a los dos acusados y a la presunta víctima, que asegura haber sido objeto de continuos abusos sexuales por los hermanos.