Las medidas o recomendaciones propuestas por la Administración para la vuelta a las aulas resultan de imposible cumplimiento, puesto que están destinadas a población infantil y adolescente que, precisamente, adolece de falta de disciplina necesaria para cumplirlas.
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La solución es sabida. ¿Cuál es? La inversión económica en contratación de los profesores que sean necesarios para efectuar el desdoble de grupos de manera que estos se reduzcan en el número conveniente para paliar los riesgos de contagio; así como la construcción de pabellones o recintos alternativos para alojar a los nuevos grupos, puesto que los centros no presentan un espacio equivalente prácticamente al doble de capacidad que necesitarían.
¿Por qué no se lleva a cabo algo tan elemental? Porque cuesta dinero.
No nos quejemos ni rasguemos las vestiduras cuando lleguen las consecuencias.
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