«Es absurdo e imposible jugar con mascarilla al balonmano»
Belén Gutiérrez, médico del Abanca Ademar, no entiende la medida de tener que competir con mascarilla, pero reconoce que no pone en riesgo la salud del deportista, aunque su utilización correcta obligaría a realizar «un mayor número de cambios e, incluso, descansos»
Fue la imagen deportiva del fin de semana - con permiso de Rafa Nadal - a nivel nacional. Abanca Ademar y BM Sinfín disputaron el primer partido de deporte de primer nivel con mascarilla debido a una criticada normativa de la Junta de Castilla y León que obligaba a su uso en deportes considerados no profesionales y que se disputasen en espacios cerrados. Maristas y cántabros fueron los primeros en cumplir esta norma que, minutos después, en Salamanca, en el Perfumerías Avenida-Araski de Liga Femenina Endesa de baloncesto, no se llevó a cabo por orden de la Federación Española de Baloncesto.
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La médico del Abanca Ademar, Belén Gutiérrez, explica que esta normatica es «absurda» porque «es una tontería ordenar jugar con mascarilla, ya que se va a descolocar de la posición en la que es efectiva a causa del sudor, de hablar y del propio juego».
«No sirve para nada», explica la médico a leonoticias, que señala que los jugadores se olvidaron de la mascarilla con el paso de los minutos porque «se les liberó la nariz y no la recolocaron». «No entiendo su uso cuando no va a tener efecto, además de que pasamos test antes de cada partido. Es entendible en otras competiciones donde no existen estas pruebas previas a los encuentros, pero no aquí», sostiene.
«Es imposible llevarla en un partido, es imposible mantenerla en el lugar donde es efectiva todo el partido y así estamos intentando hacer entenderlo a las autoridades», insiste Belén Gutiérrez.
«La mascarilla no pone en riesgo la salud del deportista»
Pese a todo, la médico insiste en que el uso adecuado de la mascarilla «no pone en riesgo» la salud del deportista. «Nadie se marea o sufre lipotimias por esto, pero sí es verdad que el jugador hiperventila y suda mucha más, porque da calor competir con mascarilla», expresa.
El principal problema, afirma, es la «incomodidad» de jugar con una mascarilla que «se humedece rápido», además de, si se jugara con ella bien colocada, esa mayor hiperventilación y sudoración.
En ese caso, Belén Gutiérrez señala que «habría que hacer más cambios o para más el partido». Por ello, en el club están a la espera de que la Real Federación Española de Balonmano tome cartas en el asunto para instar a la Junta de Castilla y León a retirar esta normativa que tanta polémica ha generado.
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