Maraña celebra su romería de Riosol condicionada por la covid-19

No ha sido la habitual romería de Riosol, pero Maraña ha podido honrar a su virgen en este 15 de agosto, si bien es cierto que con una serie de restricciones a causa de la covid-19 nada corrientes.

En la mañana de este tradicional día de Nuestra Señora de la Asunción, donde decenas de pueblos leoneses celebran sus fiestas, Maraña ha realizado varios de los actos que normalmente realizan cada año en este día, pero con matices.

A primera hora de la mañana, en la ermita de Riosol, varios vecinos han 'vestido' a la virgen y la han colocado a la entrada del templo, para que todos los que quisieran pudieran visitarla y verla cumpliendo las medidas de seguridad ante la covid-19.

En más de mil años de historia de esta tradición, Maraña no ha fallado a su virgen de Riosol ni a su carrera de caballos, que rememora a los caballeros que, en la Reconquista, defendieron este valle. Este año no iba a ser menos, ya que nunca se ha cancelado, ni siquiera en tiempos de guerras, por lo que varios jinetes han participado, en un número mucho menor al habitual, para que la tradición no sufra ningún impás.

La Virgen de Riosol ha vivido un 15 de agosto extraño, particular, pero en el que ha vuelto a sentir la devoción de los vecinos de Maraña, si bien es cierto que de una manera distinta a causa de la pandemia.