Los Campaneirus abren las Mascaradas de Invierno

Las ancestrales mascaradas de invierno, esas celebraciones que nos sigue uniendo a nuestros antepasados cuando la nieve cubre con su manto la provincia, ya están aquí. Antes del antruejo, son todavía varias las localidades en las que sus vecinos visten pieles, trajes de antaño, máscaras con cuernos y se arman de cencerros o vejigas para celebrar las tradicionales mascaradas de invierno, ligadas a los meses de crudo frío.

El mundo al revés es el late motiv de estas celebraciones que darán comienzo en el ayuntamiento de Truchas con los Campaneirus de La Cuesta, una tradición recuperada por la Asociación Trimuella. Será el último fin de semana de este mes cuando vuelvan a salir a las calles los remixacos, tamaracos, mantarracos, campanones o farramaco.

A las 18.00 horas, cuando el sol comience a esconderse, saldrán los Campaneirus por las calles de La Cuesta para, a las 18.30 horas quemar el año viejo antes del concierto de Segis y Nacho, (acordeón y gaita) a las 19.00 horas.

El domingo a las 13.30 volverán a salir Los Campaneirus para que no se pierda esta tradición cabreiresa en la que han intentado aunar diferentes personajes representados en los pueblos de la zona y que se ha recuperado gracias a los testimonios orales de los mayores de la zona.

Pero no es esta la única mascarada que se celebra en el mes de enero en la provincia. Así Rodiezmo ya salió a la calle, el primer día de enero, con sus tafarrones que escenifican el parto de la güela, el afeitado de los paisanos por parte del barbero o el inventario de las propinas recibidas.

También Santa Olaja de Eslonza ya corrió el Guirrio el Día de Reyes, pidiendo el aguinaldo por parte de El Guirrio que, antiguamente, incluso entraba a la iglesia para que el sacerdote fuera el primero en dar ese peculiar aguinaldo.

Tradiciones fiestas y celebración que nos enraízan a nuestra tierra y nos recuerdan que siempre hay un momento para poner al mundo patas arriba.

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