Igea afea al PSOE la falta de respeto a los funcionarios por tildar su Consejería de «chiringuito»

El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, afeó este viernes la falta de respeto a los empleados de su departamento que realizan un servicio público a los ciudadanos al tildar de «chiringuito» esta cartera.

En su replica en la Comisión de Economía y Hacienda de las Cortes, donde presentó su presupuesto para 2022, se dirigió a la socialista Alicia Palomo, que utilizó ese calificativo tanto en declaraciones a los medios como durante su intervención, para decirla que «no es de recibo» cuando los empleados de la Consejería realizan un servicio público.

«Ni hay tal chiringuito ni tal dispendio ha hecho una acción política que es la más reconocida fuera de la Comunidad», argumentó Igea, que ironizó en que siempre la oposición realiza la misma critica y él que es una persona paciente le cuesta resistirse a responder con lo que hace el Gobierno central de coalición. «El más caro, largo, extenso y con más vicepresidencias de la historia», apostilló.

Alicia Palomo argumentó después que la transparencia es «una actitud y no una Consejería» y rebatió que con su critica se dirijan a los empleados públicos, a los que expresó todo el respeto de su grupo, sino a la acción política de quien la dirige.

Respecto del gasto en personal, respondió a Laura Domínguez que la nómina suya y la de sus altos cargos es inferior a «la delegada de la igualdad». La procuradora de Podemos le pidió que no tenga un tono «condescendiente y paternalista» con la igualdad. «Sacan el comodín del machismo cuando no tienen argumentos», replicó Igea, que expresó a la parlamentaria más respeto por como trabaja que a su compañero (Pablo Fernández).

En cuanto a la reforma de la ley de Ordenación, Servicios y Gobierno del Territorio, la procuradora socialista Alicia Palomo pidió que se aclaren sí los 90.000 euros a las diputaciones, 10.000 para cada una, son para elaborar los mapas rurales de áreas funcionales. «No acertamos nunca, si hacemos los mapas, somos centralistas, si los hacen las diputaciones, somos vagos, cuál es su opción», replicó Igea.

«Estoy ansioso de saberlo», apostilló, a la vez que rechazó la sorpresa de la oposición por que PP y Cs hayan enmendado la ley, que enmarcó en el sistema parlamentario, la flexibilidad y la atendemos a los grupos, para añadir que más sorpresa le ha causado a él que Podemos haya votado a los miembros del Constitucional.

Precisamente, Palomo le respondió que la ordenación debe contar con la financiación necesaria para la prestación de los servicios y debe ser participativa con las entidades locales y los agentes sociales, lo que estimó que no se realiza con la modificación de la norma que está en las Cortes.

Reconoció que falta por elaborar la Estrategia de Reto Demográfico y anunció que en enero estará el borrador encargado a las universidades. «No existen los milagros, son políticas a largo plazo, pero hay que aprovechar las oportunidades», argumentó en relación a la dinamización demográfica, cuya inclusión en el presupuesto valoraron Amparo Vidal (PP) y Alba Bermejo (Cs), mientras que Alicia Palomo incidió en que en el anexo se identifican solo 700.000 euros para el retorno del talento.

Ante la critica de la oposición de poco peso de su Consejería, Igea justificó que el 83 por ciento del gasto de la Junta se destina a la política social, del que se mostró orgulloso, y afeó a los grupos de la oposición que solo sean capaces de hacer política «con la chequera, y así nos va».

«He perdido mucho peso político y físico», ironizó en relación a la aseveración de la oposición sobre el presupuesto de su Consejería, pero Laura Domínguez le recordó que el gasto social no es solo sanidad, educación o familia, sino también la cooperación al desarrollo o las ayudas al retorno.

A la procuradora socialista, que incidió en la critica a la reordenación de la sanidad, la pidió que «no alimenten el populismo», que miren las encuestas, en referencia a los escaños que otorgan al nuevo partido España Vaciada, y demandó que el PSOE «se comporte como un partido socialdemócrata europeo». «Inténtelo», solicitó.

«Menos bonito me ha llamado de todo», manifestó a Alicia Palomo, a la que preguntó dónde está la argumentación más allá de «la descalificación» y acusó a los socialistas de «estar siempre en el relato», en un debate en el que se coló la reordenación sanitaria que sirvió al vicepresidente para insistir en que el PSOE es el «partido más conservador» por no querer «tocar nada».

Temas

• Francisco Igea