La plantilla de LM afronta la última semana de negociación con «las espadas en todo lo alto»

«Con las espadas en todo lo alto». Así afrontan los trabajadores de LM Wind Power en Ponferrada la última semana de negociación del expediente de despido colectivo planteado por la dirección de la factoría de palas eólicas para un total de 393 trabajadores y que supondría además la recolocación de 245 de esos empleados en la fábrica que la multinacional tiene en Francia y 20 en la de Castellón.

Una situación que volverán a abordar en las dos reuniones previstas para esta semana, este mismo lunes a las 4 de la tarde y el martes a las 9:30 de la mañana a las que el comité negociador llegará para «ver si conseguimos que la compañía dé un pasito adelante y deje esa posición inmovilista que siempre ha mostrado», señaló Gabriel Garnelo, presidente del comité de empresa.

Además, al igual que sucedió los pasados miércoles y jueves, estas reuniones están acompañadas de jornadas de huelga en la factoría, de hecho, en esta ocasión será de una semana de forma ininterrumpida, que ya comenzó este domingo con el turno de las 10 de la noche y finalizará el viernes 13.

En ese sentido, se están realizando piquetes informativos en las entradas a la fábrica situada en el polígono de La Llanada de la capital berciana y también los trabajadores están llamados a nuevas concentraciones previas a las dos reuniones negociadoras, la primera este mismo lunes a las 15:00 horas en La Martina (frente a las instalaciones de Cat&Rest).

Con todo ello, Garnelo explicó que este nuevo paro ha sido secundado por el cien por cien de la plantilla, cuyos ánimos «están un poquito a partes iguales, un porcentaje de enfado por sentirse engañados, un porcentaje de indignación y otro porcentaje de motivación para seguir luchando por sus puestos de trabajo».

Cabe recordar que el pasado viernes el propio comité de empresa pidió a la Junta de Castilla y León su mediación «activa y presencial» para que presente en la mesa de negociación la propuesta de asumir los costes de la Seguridad Social de casi 400 trabajadores si la dirección de la compañía cambiaba el ERE por un ERTE, ya que consideran que es la única forma de que la empresa la valore y se incluya en el expediente.

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