Los hosteleros de León llaman a la movilización: «Todos estamos involucrados hasta las trancas»

«Debemos acudir a ella no solo la hostelería, la restauración y la hotelería; debemos acudir todo León, aquí estamos todos involucrados hasta las trancas». «Hay que estar ahí, es el momento; y no solo hosteleros, sino también quien siente quien sienta que le repercuta en su negocio». «Es momento de apoyar la economía de nuestra ciudad y nuestra provincia»

Así llega una cita donde los hosteleros de León llaman a la sociedad en general a acudir de forma masiva a la manifestación que este jueves partirá de la plaza de la Inmaculada (a las 10:00 horas) para exigir el regreso a la actividad del sector y la entrega de las ayudas prometidas.

El objetivo es que se convierta en un «clamor popular» ante la «dramática situación» que atraviesa uno de los sectores más castigados por la pandemia. «La única forma de protestar es movilizarnos y que nos escuchen; que en la manifestación haya 10.000 personas y una parte importante de la población nos apoye».

Diferentes empresarios del sector han tomado la palabra para recordar a la Junta que los bares y restaurantes son lugares seguros como se ha demostrado en otras comunidades. «La hostelería es supersegura. En Madrid está abierta y bajan los casos; en Castilla y León está cerrada y suben. Hay que buscar en otro sitio, en la hostelería no está el problema».

Javier Gómez (Camarote Romántico) es uno de los miles de negocios que acumulan semanas cerrados. «El Camarote Madrid lleva un par de meses cerrado porque es un sitio de barra y sin terraza. No podemos trabajar al 50% y luego cerrar a las 22:00 horas, es algo caótico». Por ello, pide que se permita estar abiertos «hasta una hora prudencial» y evitar así que se produzcan aglomeraciones en casa ni botellones.

Otro de los afectados en Martín Méndez (El Altar). Aquí contaban con ocho trabajadores y funcionaban bastante bien, aunque los «vaivenes» de las instituciones también les ha afectado. «Pensamos que el viernes se puede abrir, pero no nos enteraremos hasta el jueves. Esta improvisación y falta de previsión nos afecta muchísimo».

Adolfo Benéitez (La Somoza) está ahora trabajando únicamente con su mujer y han tenido que mandar al ERTE a algunos empleados y a otros despedirlos directamente. «Estamos al mínimo, mi mujer y yo tratando de solventar la situación. Tratamos de tirar para adelante y a ver si en febrero hay algo de certidumbre».

Restaurantes de referencia en León como Pablo no escapan de esta crisis. Juanjo Losada lamenta la situación y reconoce que «con el toque de queda es imposible dar cenas y vivir solo de mediodía. A lo mejor no merece la pena ni abrir», apunta, porque, además «llegará el momento en que si tenemos que abrir no seamos competitivos y no tengamos una hostelería de calidad como queremos.

El sector se siente completamente ahogado. Llevan ya casi un mes con sus negocios cerrados y a ello suman el primer estado de alarma, cuando siguieron teniendo que pagar facturas sin recoger beneficios.

Los hosteleros recuerdan que esta manifestación no está en juego solo su propio futuro, sino que también por el de toda la cadena de valor de la que dependen miles de puestos de trabajo en la provincia. Y es que eso es lo peor, no saber cuándo ni cómo podrán volver a su trabajo.

En estos diez meses de pandemia, a los continuos cortes en su actividad diaria suman la falta de ayudas prometidas y nunca recibidas. «Hemos recibido cero euros», coinciden todos ellos. «De todo lo que nos prometieron no nos dieron nada. Los ERTE arreglan un poco, pero no es suficiente». «Por lo menos tener ahora no sé si un rescate, pero que nos dejen de cobrar lo que recaudan porque sino no podremos trabajar».

Los hosteleros recuerdan que esta manifestación no está en juego solo su propio futuro, sino que también por el de toda la cadena de valor de la que dependen miles de puestos de trabajo en la provincia. La marcha partirá este jueves a las 10 de la mañana de la plaza de la Inmaculada y tendrá su punto álgido una hora después con la lectura del manifiesto ante la Junta de Castilla y León.