Bronca entre Jorge Javier y Belén Esteban en Sálvame Deluxe

Belén Esteban regresaba al plató de Sálvame Deluxe tres meses después. La última vez que lo hizo fue antes de que estallase la crisis del Covid-19 y parecía que iba a ser uno de esos reencuentros triunfales y emotivos entre sus compañeros. Pero no fue así. La crispación política acumulada en estos meses también hace mella entre los protagonistas de Sálvame. Belén Esteban y Jorge Javier Vázquez se enfrentaron en un debate político en el que el presentador perdió los nervios y abandonó el plató sin terminar la entrevista a la colaboradora.

La denominada 'Princesa del Pueblo' hizo honor a su cargo y quiso erigirse como portavoz de los que «lo habían pasado muy mal», sus amigas por ejemplo, y pegó una importante rajada de la clase política: «He votado a izquierdas y a derechas y estoy decepcionada con todos. Se han olvidado de la gente». Una reflexión que no gustó a Jorge Javier. «No estoy de acuerdo contigo pero respeto tu opinión», le replicó el presentador que ya tuvo fuertes discusiones con algunos de sus colaboradores por defender a ultranza la gestión del Gobierno... «Esto es un programa de rojos y maricones», llegó a espetar Jorge Javier.

Pero entonces llegó el caos. Belén considera que la réplica de Jorge Javier a la rajada política «es un rollazo» porque «él no lo vive» y esto ha sido la chispa que le ha hecho explotar al presentador: «Estoy hasta el mismísimo de que me digan que 'tú no lo vives', no te lo voy a consentir. No vayas con ese rollo barato», comenzaba a decir.

Jorge asegura que tiene familia que lo está pasando «igual de mal» que la de Belén, pero que él no lo cuenta: «No me pongas en tu mismo lugar. Me voy a cabrear y mucho. Estoy del discursito de 'mis amigas viajan en metro', ¿de qué coño te crees que viven mis hermanas? No vayas por ahí porque vamos a acabar muy cabreados. No me vas a dar lecciones de nada», continuaba el presentador, visiblemente afectado.

Después, Jorge Javier confesó que no le apetecía continuar con la entrevista, que no quería preguntarle nada más a Belén (que estaba siendo entrevistada) y decidió abandonar el plató. Lydia tomó el mando tras el abandono del presentador, ante la estupefacción de todos los colaboradores y las lágrimas de Belén.