Lourdes, luz en la penumbra

Pidieron salud y recordaron a los enfermos y a quienes les cuidan en una tarde en la que el tiempo, por suerte, se confabuló con ellos.

Varios centenares de fieles se encomendaron a Nuestra Señora de Lourdes con motivo de la 28 Jornada Mundial del Enfermo.

Comenzando en el interior de la Catedral de León, la cita dio paso al tradicional desfile de antorchas que cada año celebra la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes.

El sentido de este acto es emular al que cada noche tiene lugar en el santuario francés de Lourdes y que es uno de los actos más destacados de la Hospitalidad dedicada a la atención a los enfermos, de manera especial a los discapacitados físicos, que promueve actividades para favorecer la integración social de este colectivo.

Los participantes, acompañados por la Virgen, partieron del altar mayor de la seo leonesa y desde allí se dirigieron a las calles de Santa Marina.

Una cita imprescindible para la Hospitalidad, que volvió a cumplir un año más.