Y en el escaparate, un grito de ánimo
La Casa del Marco, en León capital, convierte su escaparate en un permanente grito de ánimo | Desde el inicio de la pandemia las frases se suceden para alentar a la población | «La mejor recompensa llega cuando la gente cruza la puerta y nos lo agradece», asegura María Juana Ramos
Enmarcadas, como corresponde al establecimiento, las frases de ánimo salen al paso de los leoneses desde el escaparate de 'La Casa del Marco', en la calle Villa Benavente, a un paso de la conocida Plaza de las Cortes Leonesas.
No hay una rutina fija para el cambio de frase pero lo que sí es evidente es que quien cruce ese tramo de calle se verá sorprendido por el mensaje.
«Todo comenzó con la pandemia, todos los hemos pasado muy mal y era como mi forma de apoyar y animar a los leoneses en un momento tan complicado», asegura María Juana Ramos.
El mundo sentido en una frase
A ella siempre le gustó la lectura y la poesía. Y por ahí tuvo un punto de apoyo para sacar adelante su idea: «Desde hace cuatro años, dentro de la tienda, escribo frases que se quedan ahí. Las tengo todas anotadas. Ahora lo que hice fue buscar una pizarra y las escribo para que la gente las pueda ver».
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Y la respuesta a pie de calle no ha podido ser mejor. «Es mucha la gente que se para, otros hacen fotos y otros deciden entrar y nos dicen: 'Muy buena esa frase'. Esa es la mayor recompensa y la mejor recompensa», sentencia la titular del establecimiento.
Apenas hace unos días tenía la frase: «No dejéis de protegeros, para protegernos todos!!! No bajemos la guardia... Que no se nos olvide lo mal que lo hemos pasado. Seamos responsables!!! ¡Gracias, ánimo».
La última, de Benedetti
Era un mensaje de concienciación, en ese caso. En otras ocasiones, como este mismo lunes, María Juana Ramos, recurre a firmas conocidas. Ahora ha recurrido a Mario Benedetti. Según remarca Juana siente pasión por este escritor, poeta, dramaturgo y periodista uruguayo, integrante de la Generación del 45. «Me encanta», dice. Y de ahí su sentencia: «No te rindas por favor, no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda... Aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tus sueños. Porque cada día, es un comienzo nuevo».
La rúbrica llega con un sentido 'Gracias, ánimo'. Las dos mismas palabras que no pocos viandantes han hecho llegar a la responsable de la iniciativa porque a falta de besos y abrazos, el corazón se asoma desde el escaparate.