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Un Audi A6 y 1.700 kilómetros por el desierto para repartir ilusión
Alejandro Martínez y Javier Núñez, pilotos del equipo Autos Yeyín, inician este viernes un viaje por Marruecos que les llevará a recorrer durante seis días el desierto para repartir juguetes y material escolar | El coche elegido es un Audi A6 de 28 años y motor 2.600 V6 de gasolina
A veces Papá Noel en lugar de en trineo, viaje en coche. Más concretamente en un Audi A6 de 28 años que en lugar de volar, recorrerá el desierto emulando a los Reyes Magos.
En este caso no son tres sino dos los 'magos' que llevarán la ilusión a los niños del desierto de Marruecos. Este viernes arranca la aventura de los pilotos Alejandro Martínez y Javier Núñez del equipo Autos Yeyín, que durante seis días recorrerán más de 1.700 kilómetros por las dunas marroquíes.
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El objetivo, repartir juguetes y material escolar para los niños «hasta el infinito y más allá». Es precisamente este el eslogan de la 'Maroc Challenge', un proyecto en el que estos dos leoneses se embarcan con la ilusión como motor.
De Midelt a Saida en seis etapas
Aficionados al volante desde hace años, esta dupla leonesa probará su pericia durante esta aventura solidaria que este viernes arranca en Midelt. El reto, llegar a la playa de Saida en seis etapas extremadamente exigentes.
Alejandro ha asumido la parte mecánica, montando y desmontando el coche hasta tenerlo a punto. Su labor es que la máquina falle lo menos posible y que haya recambios para cualquier tipo de improvisto. El coche elegido es un Audi A6 de 28 años y motor 2.600 V6 de gasolina. La tracción a las cuatro ruedas del modelo ha sido clave a la hora de decantarse por el vehículo.
Condiciones extremas y un objetivo en mente
Por su parte, Javier ha sido el encargado de llevar a cabo toda la burocracia y el papeleo para viajar sin problemas desde Midelt a Saïdia, un recorrido de 1.740 kilómetros que pretender salvar en seis etapas que coinciden con el puente de la Constitución. La temperatura media es de 18 grados, con cero grados de mínima durante la noche y 21 de máxima cuando luce el sol.
No será un terreno fácil y el principal desafío del recorrido será llegar a la playa de Saïdia. Sin embargo, el esfuerzo merece la pena porque el objetivo de sta aventura «es pasarlo bien, volver con el coche entero, pero, sobre todo, entregar el material escolar y juguetes por escuelas y aldeas que son una parada obligatoria en el itinerario.
