Borrar
Hija de marqués y prostituta en Twitter: los entresijos del escándalo que sacude Reino Unido

Hija de marqués y prostituta en Twitter: los entresijos del escándalo que sacude Reino Unido

Lady Beth Douglas, de 18 años e hija del marqués de Queensberry, falleció por una sobredosis de heroína y cocaína en Notting Hill, uno de los barrios más exclusivos de Londres

Sábado, 24 de noviembre 2018, 17:29

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Cuando el pasado 7 de marzo Lady Beth Douglas, hija del marqués del Queensberry, murió con apenas 18 años, la sociedad británica se quedó en estado de shock. La historia podría salir de cualquier película sórdida de adolescentes dirigida por Larry Clark: la de la hija de un aristócrata cuyo antepasado mantuvo una guerra pública con el mismísimo Oscar Wilde. Fue su propio novio, Jenan Herzos Karagoli, quien la encontró muerta en un apartamento de Notting Hill, tras sufrir una sobredosis de heroína y cocaína.

Lady Beth falleció durante una exclusiva fiesta celebrada en Notting Hill, un barrio donde las casas pueden alcanzar los 25 millones de libras. Douglas se encontraba en el piso de un conocido traficante de drogas. Lo que todos pensaron que era un sueño profundo fruto de las drogas se reveló como un fallo cardiaco de la joven.

En 2016 había recibido una beca que la reconocía como una de las mejores jóvenes violinistas del país. Antes de morir, anunciaba sus servicios como prostituta en Twitter, publicando imágenes en lencería y de sus «esclavos», clientes que, al parecer, contrataban sus servicios como dominatrix.

Tras su muerte, ha salido a la luz que Lady Beth sufrió anorexia y recibía tratamiento por un trastorno bipolar.

Con sus striptease a través de Skype llegó a ganar unas 500 libras, pero no era suficiente. Así, pasó a buscar clientes en diversos pubs de Londres cercanos al parque Westbourne. Para entonces, su novio asegura que estaba todo el día colocada por la cocaína y que llevaba los clientes al piso que compartían.

Una trágica historia en una familia, a de los Queensberry, a la que desde hace siglos se le achaca una maldición por la cantidad de muertes inexplicables ocurridas a sus miembros.

Esta aristócrata saga británica se remonta al siglo XIII, cuando las desgracias eran consecuencia de las guerras que asolaron la familia. A partir del XVIII se acumularon los problemas, como la locura que sufrió James, marqués de Queensberry, encarcelado por sufrir problemas psicológicos. Escapó de su celda, se coló en la cocina del palacio, mató al cocinero y cocinó su cadáver.

En el siglo XIX el octavo marqués de Queensberry se disparó durante una cacería, nunca se supo si por accidente o intencionadamente. Su segundo hijo, Francis, murió escalando en los Alpes y el tercero, James Edward, se cortó la garganta en un hotel de Londres.

El episodio más famoso es el del noveno marqués de Queensberry, John Sholto. Su primer hijo, Francis, murió en un accidente de caza sobre el que siempre planeó la duda. El segundo, Alfred, más conocido como 'Bosie', fue acusado de mantener una relación homosexual con el escritor Oscar Wilde y encarcelado por ello. Bosie terminó casándose en 1902 con una mujer y teniendo un hijo apodado 'el loco demente'. De desgracia en desgracia se llega hasta Alice, la hermanastra de 52 años de Lady Beth, conocida por ser expulsada de 13 escuelas y por casarse con Simon Melia, un ladrón que conoció en la prisión en la que ejercía de voluntaria y que terminó huyendo con la niñera.

Ahora, Lady Beth protagoniza la última fatalidad de esta familia.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios