León, Comunidad Autónoma

El pasado día 27 de diciembre se cumplió un año desde que una Entidad Local de la provincia, concretamente el Ayuntamiento de León, aprobara en Pleno la moción presentada por la Unión del Pueblo Leonés en favor de la constitución de la Región Leonesa como Comunidad Autónoma del Estado Español. A partir de ahí, han sido muchas entidades locales las que se han sumado a esta iniciativa y han aprobado una moción similar, tanto Ayuntamientos como Juntas Vecinales. El dato es muy significativo, y es que un total de 46 Ayuntamientos y 58 Juntas Vecinales de la provincia aprobaron hasta ahora la moción, además de un Ayuntamiento de Zamora y otro de Salamanca. Otro dato a tener muy en cuenta es que los Ayuntamientos de la provincia que han aprobado la tan mencionada moción pro autonomía leonesa conforman una población de 218.305 habitantes, lo que supone un 47,44% de la población total de la provincia.

Esta situación reivindicativa actual, que sin duda va ir in crescendo, nos hace recapacitar sobre el motivo que nos ha llevado a ella, si bien lo cierto es que es una vuelta acrecentada a una reivindicación histórica que comenzó incluso antes de 1983, año en el que entró en vigor el Estatuto de Autonomía de la actual Castilla y León, y en su día dio lugar a la histórica manifestación del 4 de mayo de 1984 en la que más de 90.000 personas salieron a la calle para exigir la Autonomía para León. Ni que decir tiene que este sentir popular de la época fue denostado por los gobernantes que regían los destinos de los leones por aquel entonces.

Debemos, por tanto, poner de manifiesto las razones, además de las históricas y que deberían ser suficientes para la obtención de la tan ansiada constitución de la Región Leonesa como la Comunidad Autónoma número 18 de España. Un dato importante e indiscutible es que en los últimos 20 años la población de la provincia de León ha disminuido en cerca de 50.000 personas lo que supone casi un 10%, y este dato es fácilmente comprobable consultando los padrones oficiales que publica el Instituto Nacional de Estadística. Esta despoblación viene propiciada en gran medida por el centralismo que propugna desde siempre la Junta de Castilla y León, con su incansable afán de fomentar el eje Valladolid-Palencia-Burgos en detrimento de la Región Leonesa.

Hay que destacar además numerosas decisiones políticas que han perjudicado enormemente a León como el fin de la minería, industria que en la provincia llegó a ocupar efectivamente a más de 45.000 personas, y cuya desaparición ha sido importante para llegar a las más que alarmantes cifras de empleo con las datos oficiales de la Encuesta de Población Activa.

Existen datos reflejados en informes económicos y sociales que corroboran estás afirmaciones. Así, es necesario hacer mención a un importante estudio sobre el sector financiero en la provincia leonesa realizado ya en el año 2013 por el ilustre economista leonés Don José Miguel Fernández Fernández, Catedrático de Economía Financiera y Contabilidad, y Decano de la Facultad de Económicas de nuestra Universidad de León, que en un minucioso análisis sobre esta situación financiera entre los años 1986 y 2012, llega a conclusiones como que hasta el año 1998 los depósitos bancarios por habitante se situaban por encima del de los créditos, y a partir de ahí se produce una situación inversa, siendo además los créditos por habitante en León muy inferiores a los de la Comunidad Autónoma y España. Así se pone de manifiesto la existencia cada vez más clara de un sistema financiero en León centrado en la captación de depósitos de los ahorradores en detrimento de operaciones activas de concesión de créditos, que redundarían en una progresión al alza del sector económico, de manera que se incumplen claramente las exigencias de una economía moderna y de crecimiento.

Estudios más recientes como los realizados este mismo año por la asociación Proyecto León, que analizan la economía y la sociedad de las provincias de la Región Leonesa y lo comparan con las provincias castellanas de la Comunidad, concluyen con datos objetivos y rigurosos que la Región Leonesa es la que peor evolución ha tenido en España, situando a León y Zamora en los últimos puestos del país y Salamanca casi a su nivel. Pero curiosamente la Región Castellana ha tenido una evolución marcadamente mejor a pesar de formar parte de la misma administración autonómica.

Así las cosas, solo nos basta indicar si esta transformación de la Región Leonesa en Comunidad Autónoma es posible en nuestro ordenamiento jurídico. Pues bien, ello viene avalado por los artículos 2 y 143 de la Constitución Española, siendo necesaria una modificación del actual Estatuto de Autonomía de Castilla y León, que es posible sea aprobado por una mayoría cualificada de la Cortes Autonómicas. Pero además hay otra vía posible para ello que pasaría por aprobar a nivel estatal una Ley Orgánica específica para tal fin.

El deseo de una autonomía leonesa propia es un sentimiento mayoritario y no sólo de los partidos denominados leonesistas que viene a nutrir la importante lista de deseos de estas fechas navideñas, por lo que me gustaría trasladar a todos los leoneses mis mejores deseos para el año próximo, un año 2021 en el que espero y confío podamos volver a abrazar y besar a nuestros seres queridos.