Borrar
Núria Marín. Efe
La socialista Núria Marín retira el lazo amarillo de la Diputación de Barcelona

La socialista Núria Marín retira el lazo amarillo de la Diputación de Barcelona

Primera crisis de gobierno en la entidad provincial entre los socios del PSC y JxCat

Cristian Reino

Barcelona

Miércoles, 24 de julio 2019, 18:42

Necesitas ser registrado para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La presidenta de la Diputación de Barcelona, la socialista Núria Marín, retiró este miércoles el lazo amarillo que lucía de la fachada del edificio provincial desde la pasada legislatura, en que estaba gobernado por el PDeCAT.

Se trata de la primera medida que adopta la dirigente socialista, un día después de que se formalizara el Gobierno de la Diputación de Barcelona, integrado por el PSC y JxCat.

Un ejecutivo que hizo saltar chispas entre los independentistas, porque JxCat prefirió apoyar al PSC antes que a ERC, a pesar de que los dos partidos de izquierdas habían obtenido el mismo número de escaños, lo que escenificó las enormes diferencias que hay en el secesionismo. La decisión de Marín visualiza el cambio de gobierno pero provoca también la primera crisis en el ejecutivo provincial.

De hecho, los nacionalistas anunciaron que impulsarán una moción para que la Diputación restituya el lazo amarillo en defensa de los presos. El mismo lazo que hay en el Palau de la Generalitat o del Ayuntamiento de Barcelona. «Los símbolos deben servir para que todos se sientan reflejados, no para dividir», según Nuria Marín, presidenta de la Diputación, alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat y miembro de la ejecutiva del PSOE para justificar su retirada.

La decisión de Marín sirvió este miércoles de combustible para Esquerra, que aprovechó para cargar contra el pacto entre los socialistas y los nacionalistas. «Hola JxCat, se os ha caído el lazo amarillo de la Diputación, ¿lo podéis volver a poner, por favor?», afirmaron destacados dirigentes republicanos. A pesar de que JxCat montó en cólera, en realidad no pudo hacer nada distinto de lo que ya le tocó al socialista Jaume Collboni en el Ayuntamiento de Barcelona cuando Ada Colau volvió a colgar el lazo: tragarse el sapo.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios