La Guardia Civil sitúa a Trapero en la cúspide del proceso independentista
El mando que dirigió la investigación sobre el 'procés'asegura que el major se dedicó a torpedear las investigaciones sobre la intentona separatista
Jornada muy complicada para Josep Lluís Trapero en la Audiencia Nacional. El mando de la Guardia Civil que dirigió desde el 2015 la investigación sobre el 'procés' ha situado directamente al major de los Mossos d'Esquadra en la cúspide de la intentona separatista. El teniente coronel Daniel Baena, testigo en la causa contra la cúpula del cuerpo autonómico, ha llegado a afirmar que Trapero fue encumbrado a los más alto de la policía catalana para torpedear, o al menos neutralizar, las investigaciones sobre el proceso independentista.
Según Baena, la decisión del Govern de recuperar la figura del major en abril de 2017 y darle este cargo al entonces comisario Trapero era «una forma de blindar» al imputado al frente de los Mossos porque, ha sostenido el testigo, Trapero le era indispensable a Carles Puigdemont para controlar a la policía catalana. El mando de la Guardia Civil ha recordado que Trapero, todavía como comisario, en noviembre de 2015 dispuso que todas las investigaciones de la Policía Judicial de los Mossos sobre el procés ordenadas por la Audiencia Nacional le fueran notificadas a él en persona y no a los jueces y fiscales que habían dispuesto esas pesquisas. Daniel Baena ha acusado al imputado de «cercenar» la «vía funcional» que era la que obligaba a los mossos a informar a los togados para dar «prevalencia» al «canal orgánico», que forzaba a los agentes a dar cuenta de las investigaciones a sus superiores exclusivamente.
«Prostituir» a los Mossos
«Fue así como la información (de las investigaciones judiciales) llegó a manos de los propios organizadores del referéndum. Llegó a manos de gente que no son Policía Judicial», ha insistido el testigo, quien ha recordado que la Generalitat y «sus abogados» usaron los datos que Trapero ordenó entregar a la cúpula de los Mossos y no a los jueces para atacar procesalmente las investigaciones de la Guardia Civil.
El mando del instituto armado ha llegado a apuntar que Trapero «prostituyó» la labor de la Policía Judicial, facilitando que importantes investigados estuvieran al tanto de las pesquisas de la Guardia Civil.
«Nunca, nunca, nunca»
El teniente coronel, que en todo momento ha destacado la «actitud no colaborativa» de los Mossos en la investigación del procés y en los registros, ha denunciado que el cuerpo policial que dirigía Trapero «nunca, nunca, nunca» llegó a poner en marcha una «investigación propia» sobre las maniobras que el Gobierno de Carles Puigdemont estaba llevando a cabo para declarar la república.
Daniel Baena ha puesto en valor ante el tribunal el documento denominado 'Enfocats', la supuesta hoja de ruta del Govern hacia la independencia. Ha insistido que ese informe demostraría que desde el principio la Generalitat consideró que los Mossos podían convertirse sin demasiados problemas en un «estructura de Estado» de la futura república. Según el testigo, Trapero, por su «liderazgo», era una pieza central en los planes de Puigdemont y los suyos para «adaptar, redimensionar y orientar» a los Mossos a finde convertirlos en «estructura de Estado» con capacidad de «garantizar el control efectivo del territorio» del nuevo país.
Había tal «unidad de acción» entre Trapero y el Govern que -ha revelado Baena- que el major llegó a reunirse «en secreto, a puerta cerrada» con el propio Puigdemont después del 1-O. En ese encuentro, según el testigo, el expresidente felicitó al imputado por la actuación de la policía autonómica el día del referéndum, cuando no actuó para frenar la votación.
Esa supuesta sintonía entre Puigdemont y Trapero también se habría puesto de manifiesto en una carta cordial que el primero remitió al segundo el 20 de octubre de 2017, pocos días después del 1-O, en el que lamentaba la «persecución judicial» a la que estaba siendo sometido el jefe de los Mossos.