Dar visibilidad a los invisibles

Visibilizar, dar voz, que la sociedad se conciencie de que existen. Este ha sido el objetivo de la entrega del símbolo internacional de las discapacidades orgánicas, enfermedades que duelen, condicionan la vida de quienes la padecen, pero no se ven a simple vista.

La presidenta de Cocemfe León, Patricia García, ha explicado que, en muchas ocasiones, aquellos que sufren estas patologías no las tienen ni siquiera reconocidas. «Si el que te valora no ve la enfermedad y no tienes manera de demostrárselo, vives una situación complicada», señala.

En la Catedral se ha procedido a la presentación de dicho símbolo, realizada en 41 ciudades española de forma simultánea, para dar cabida a estas patologías y dar conocimiento de las mismas a la sociedad leonesa.

«No son discapacidades que se vean a simple vista, como unas muletas o una silla de ruedas, por lo que son muy difíciles de comprender y percibir para la sociedad», explica el alcalde de León, José Antonio Diez, que ha agradecido esta acción de Cocemfe para «dar visibilidad y voz a este problema» en una ciudad como León que, asegura, tiene más de 12.000 personas con algún tipo de discapacidad.

No hay un censo estipulado de personas con discapacidad orgánica, que afectan desde al corazón, los riñones, al hígado... o al sistema nervioso y locomotor. Es un duro compañero de viaje con el que los que lo padecen tienen que convivir.

«Te condiciona la vida, más aún si te pilla joven. Son muchas visitas al hospital, tratamientos largos y dolores, que condicionan tu vida laboral, social y familiar», asegura García.

En busca de dar un paso más para que lo invisible sea visible para todos, Cocemfe León ha querido arrojar luz a la discapacidad orgánica y que pase del ostracismo a la comprensión.