El primer módulo de la Facultad de Medicina de León estará listo en el curso 2029-2030
El nuevo edificio echará a andar coincidiendo con los 50 años de la ULE y rectora y presidente de la Junta confían en que la memoria se apruebe para los primeros 80 alumnos lleguen en septiembre de 2026
Un día «histórico» para León y su universidad. Así calificaba el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, la jornada que se ha vivido este lunes 3 de noviembre. Acompañado de los consejeros de Sanidad y Educación, se citaba en el Rectorado de la Universidad de León con la rectora Nuria González y su equipo para abordar los últimos pasos hacia un «hito» para León, para Castilla y León y para «todo el sistema universitario y sanitario».
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Trece meses después de que el consenso entre universidades permitiera la ansiada llegada del grado de Medicina a León, universidad y Junta volvían a reunirse para avanzar como única novedad que el primero de los dos módulos de la Facultad que se levantará en el campus estará listo en el curso 2029-2030.
Los trabajos previos a levantar el edificio de la nueva facultad en la explanada del campus de Vegazana entre la Biblioteca y el CEIP La Palomera ya han comenzado. El primero de los dos módulos que darán vida al edificio, que promete convertirse en referente del campus, albergará a los primeros estudiantes precisamente el curso en el que la Universidad de León cumplirá 50 años desde su creación.
En diciembre habrá un primer informe autonómico antes de ir al Ministerio
Pocas más novedades en una comparecencia que se anunciaba con pompa y boato pero que no ha dejado muchos más titulares más allá del paso firme que coge un proyecto demandado y exigido desde hace décadas por la sociedad leonesa.
En septiembre de este mismo año la Universidad de León, tras un trabajo «exigente» y que demandaba la participación de varios vicerrectorados, la memoria del grado lograba aprobarse por unanimidad, como recordaba la rectora Nuria González, en todos los estamentos de la jerarquía universitaria para elevarse a la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Castilla y León, que emitirá un primer informe en diciembre y que Fernández Mañueco está convencido de que será favorable y se podrá elevar ya sí al Ministerio de Universidades.
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El objetivo que se marcan ambas instituciones es que en septiembre de 2026 los primeros 80 alumnos de Medicina ya puedan comenzar sus clases en la facultad de Ciencias de la Salud, que sigue acondicionándose con un laboratorio de anatomía para dar su espacio formativo al nuevo grado hasta que la nueva facultad esté lista.
Con la aspiración de que la facultad de Medicina de León sea una «puerta abierta al futuro que atraiga talento, retenga vocaciones» y ayude a que nuevos profesionales se incorporen al sistema sanitario, la Rectora confía en que León será «referente académico y científico» con estos estudios.
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Mañueco se apuntan un tanto y presume de su comprimiso
Sin «ninguna duda» de que la memoria se aprobará, el presidente de la Junta se congratulaba de su papel para lograr la llegada de Medicina y encontrarse, trece meses después de que se lograra el consenso entre las cuatro universidades públicas, anunciando novedades en el grado.
«Orgulloso» del trabajo de la ULE y asegurando que este es un momento «histórico» para la universidad y para León, fiaba su compromiso al proyecto dotando de docentes, infraestructuras de Sacyl y nuevas partidas presupuestarias para sacar adelante los estudios. Cifra por el momento en cerca de 3,8 millones de euros la inversión entre 2025 y 2026 en el campus de Vegazana y más de cinco millones el próximo año para el de Ponferrada.
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En este sentido, las reuniones para avanzar con el tema de la financiación en el sistema universitario siguen. Este mismo martes las cuatro universidades públicas se reúnen para abordar este y otras cuestiones y Fernández Mañueco asegura que, además del «apoyo moral», pueden contar con el económico.
Falta de médicos y pulla al gobierno central
La importancia del grado de Medicina radica no solo a nivel formativo y académico, sino sobre todo profesional y práctico. La falta de profesionales y las jubilaciones son uno de los principales retos en una provincia, León, que necesita de relevo generacional para atender a una población cada vez más envejecida. En este sentido, la Universidad ve en el grado una oportunidad de atraer y retener talento.
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Fernández Mañueco por su parte ponía en la diana al gobierno central, pidiendo que ponga «a disposición de las autonomías más profesionales sanitarios» porque «es presumible que necesitemos más profesionales» especialmente en algunas especialidades.
Con paso firme y sintonía institucional la Universidad de León sigue dando pasos para que el próximo curso los primeros futuros doctores formados en León comiencen su formación.
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