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Un agente muestra algunos objetos perdidos. Noelia Brandón

La Policía Local de León recibe 649 objetos perdidos este año y 1.456 personas han reclamado alguno de ellos

La Oficina de Objetos Perdidos, situada en San Marcelo, tiene en su almacén sillas de bebé, medidores de glucosa o un extintor | Los agentes advierten del peligro en épocas de aglomeración de gente y sitúan el rastro como 'punto caliente' de robos

RUBÉN FARIÑAS

Jueves, 1 de enero 1970

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Ordenadores, cámaras de fotos o 42 móviles solo este año. Maletas llenas de ropa, una guitarra eléctrica o un extintor.

Estos son solo algunos de los objetos que cada día entran en la Oficina de Objetos Perdidos de la Policía Local de León.

El agente Velasco es uno de los agentes que trabajan en este departamento al que llegan desde los productos más comunes como llaves, carteras o móviles hasta sillas de bebé, estuches de cigarrillos electrónicos, medidores de glucosa o un extintor.

En lo que va de año, 649 objetos han sido entregados en esta dependencia municipal, una cifra algo superior a los que recibieron en años anteriores. Según la clasificación que establece la policía estos son los registros: 230 carteras, 138 DNI's, 27 documentos de conducir, 24 bolsos y 230 varios.

La palma se la llevan las carteras, muchas de ellas vacías, ya que solo el 20% de ellas aparecen con dinero. «Depende de las manos que caigan; hay gente que las entrega con dinero, encuentran una patrulla y se la dan, otros cogen el dinero y solo devuelven la documentación». La vez que más dinero se devolvió fueron 500 euros en metálico, aunque los leoneses son más bondadosos de lo que parece. «Han llegado muchas carteras con 100 u 80 euros».

Los denunciantes

El número de denunciantes o personas que han llegado preguntando por un objeto sustraído o extraviado también ha crecido. Hasta septiembre, 1.456 ciudadanos han acudido a la oficina. El pasado año fueron 2.022, el anterior 1.838 y esa es la línea que marca desde que se tiene registro.

Las épocas más 'calientes' son aquellas con más aglomeraciones de gente y el lugar 'fetiche' del caco es el rastro de Papalaguinda. «En el rastro se roba mucho; a las mujeres las abrasan, se roban carteras a destajo, a pesar de las patrullas de paisano que vigilan la zona los domingos».

¿Cómo actúan los agentes?

Los agentes de la Policía Local de León tratan de localizar a los dueños de los objetos, en caso de que estén documentados. Si lo que se entrega es dinero, se queda en depósito y es devuelto a esa persona que lo entrega si no es reclamado en dos años. El resto, pasan a un almacén o a una caja fuerte.

El primer consejo y la obligación es devolver aquello encontrado en la calle a la policía lo antes posible. Y ya se sabe, hoy es otro el que lo ha perdido, pero mañana podrías ser tú.

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